CCOO Cataluña pide a Junts que "no se excuse en la anécdota del pan bimbo" para oponerse a la jornada de 37,5 horas

Barcelona

En las filas de Junts todavía hoy escuece el duro reproche del secretario general de CCOO, Unai Sordo, quien a raíz de la oposición de los de Puigdemont a la propuesta para reducir la jornada laboral a 37 horas y media, afirmó que el partido post convergente es "más inútil que la última rebanada de pan bimbo" y de "hacer política jodiendo al personal". Un mes después de esta encendida crítica, la líder de CCOO en Cataluña, Belén López, ha admitido haber sentido "sorpresa" al escuchar las declaraciones de Sordo. "En mi casa nos terminamos todas las rebanadas, somos familia numerosa, y no queda ni una sola rebanada de pan bimbo". A pesar de reconocer veladamente lo desafortunadas que fueron las palabras del máximo dirigente de su sindicato, López ha vuelto a poner el foco en Junts: "También ellos a nosotros nos han llamado sindicato español y a mí eso no me pareció lo más acertado", ha recordado, a la vez que ha reflexionado que "estas polémicas lo que hacen es diluir el mensaje de fondo y buscar una excusa o una coartada y no debemos caer en eso, debemos estar por encima".

El apoyo de Junts es imprescindible para que la reforma horaria vea la luz, porque es el Congreso quien debe validar la propuesta del gobierno y es Puigdemont quien tiene la llave de la mayoría. De ahí que a bando y bando, sindicatos y patronal le estén presionando, los primeros para convencerle, los segundos, para que se mantenga en el no. Y por ahora son los empresarios quien van ganando la partida. Conscientes de ello, CCOO en Cataluña ha presentado este martes una nueva campaña que invita a los ciudadanos a escribir cartas a los diputados y diputadas para pedirles que voten a favor de esta reducción de la jornada laboral, por qué razones "no les da la vida" y "qué harían con esta media hora de más al día".

El pacto por esta reforma horaria salió adelante sin el apoyo de la patronal, que desde un primer momento se ha desmarcado de ella. Para tratar de convencerles, López propone "poner datos encima de la mesa". Unos datos que según CCOO avalan la viabilidad de la medida, porque "la productividad por hora y trabajador ha incrementado y los beneficios para las empresas son históricos". Desde CCOO se abren a negociar "todas las medidas de acompañamiento a las empresas" que sean necesarias, "siempre que no se desvirtúe el objetivo de la norma". En caso de no conseguir que tanto Junts como los empresarios se suban al carro de la rebaja horaria, no descartan movilizaciones.

Los buenos datos que ha dejado el mes de mayo en cuanto a ocupación sirven también de espaldarazo para la presión sindical. "Medidas como subir el salario mínimo, convertir los contratos temporales en indefinidos han servido no para destruir ocupación, sino para todo lo contrario", defiende López, que añade que lo mismo sucederá con la jornada laboral, "no empeorará el mercado de trabajo, todo lo contrario".