¿Cómo será el laboratorio catalán de alta seguridad que estudiará virus letales?

Barcelona

El dengue, la covid, el SARS, la gripe A, el ébola o la malaria. Son nombres que asustan, pero que forman parte de una realidad cada vez más cercana. Por eso es una buena noticia el anuncio de que Cataluña contará con un laboratorio de alta seguridad para investigar estas enfermedades de origen animal que afectan a los humanos y que pueden ser letales.

Quien está detrás de este proyecto es el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (IRTA), que tiene como objetivo abrir dentro de tres años esta unidad de experimentación de nivel de bioseguridad 3, uno de los más peligrosos. Salvador Macip, científico, ha celebrado la existencia de un centro como este —que hay pocos en el mundo—, ya que sirve para estudiar enfermedades que pueden causar mucho daño a las personas. Una iniciativa que "va en la línea contraria a lo que están haciendo los Estados Unidos", donde "se están prohibiendo estas investigaciones por considerarse peligrosas".

Los patógenos que se investigarán serán, sobre todo, aquellos que pasan de animales a humanos y que provocan enfermedades letales como el dengue, la malaria o la propia covid. Esta interconexión entre animales y personas "no es nueva", ha explicado el director general del IRTA, Josep Usall, pero sí que el cambio climático y la globalización han contribuido a que sea más frecuente: "Ha intensificado lo que de forma natural ya ocurre".

¿Cómo será?

El laboratorio será un espacio de 1.000 m² con tres niveles y estará completamente cerrado, "como un búnker", ha apuntado Usall. Para entrar, las personas deberán quitarse la ropa, ducharse y ponerse una vestimenta especial, ya que no se quiere "que entre ni salga nada del laboratorio", especialmente que no salga. En su interior habrá cría de ratones, hurones y mosquitos para realizar estas investigaciones. El laboratorio estará situado en la Universidad Autónoma de Barcelona, donde ya existe otra infraestructura de bioseguridad de nivel 3. De hecho, este ha sido uno de los motivos para construir el nuevo laboratorio en ese lugar, porque ya cuentan con lo más complicado: "Tener personal especializado en este nivel de seguridad".

El laboratorio tendrá sus propias líneas de investigación, pero también estará abierto a otros centros de Cataluña, o de fuera, que quieran venir a experimentar temporalmente. También podrán hacerlo empresas, que ya han empezado a realizar consultas para alquilar los espacios y desarrollar su investigación. La primera línea de investigación, ha detallado Usall, serán las enfermedades con vectores, es decir, los insectos que transmiten enfermedades, como los mosquitos tigre. También ha hecho un llamamiento a la calma, asegurando que se cumplirán todos los protocolos para que no se escapen estos animales, y ha celebrado que el gobierno haya apostado por esta infraestructura, ya que "volverá a haber una pandemia; no sabemos cuándo, pero ocurrirá, y debemos estar preparados".