ERC y Junts critican el acuerdo sobre la financiación catalana por falta de ambición
El partido de Junqueras lamenta la falta de concreción en el calendario sobre la recaudación del IRPF mientras que la formación de Puigdemont exige el concierto económico y avisa que no validará el pacto en el Congreso
El pacto permitió la investidura del socialista Salvador Illa. / Europa Press News
La resaca de la Comisión Bilateral Estado-Generalitat que reflejó un primer acuerdo para desplegar un nuevo modelo de financiación para Cataluña no ha satisfecho a los partidos independentistas, particularmente a ERC, que en verano pasado firmó un pacto más ambicioso que facilitó la investidura de Salvador Illa. Los republicanos reclaman "menos escenificación y más concreción" a la Generalitat, una crítica para sintetizar el malestar por la rebaja que supone el documento de este lunes en relación con el acuerdo con el PSC del año pasado.
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Por ejemplo, en la recaudación del IRPF. La bilateral se limita a detallar que la Generalitat incrementará su participación en la recaudación del impuesto de la renta, a diferencia del pacto de investidura, que situaba en 2026 el ejercicio en el que la Hacienda catalana gestionaría todo el IRPF.
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Ester Capella: “No està blindat el principi d’ordinalitat”
En declaraciones al programa Aquí Catalunya de la SER, la portavoz de ERC en el Parlament, Ester Capella, ha recordado al ejecutivo de Illa que no aprobará los próximos presupuestos de la Generalitat si no hay concreciones con la financiación: "O el Govern se pone manos a la obra o no hay posibilidad de nuevos acuerdos". Los republicanos reclaman un calendario, una planificación y las modificaciones legales necesarias para garantizar la financiación singular. Y sitúan a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, como obstáculo en la negociación, que situó el respeto al principio de ordinalidad solo el preámbulo.
En cambio, fuentes del Govern consultadas por la SER detallan que Montero también ha participado en los avances que han permitido el pacto entre ejecutivos, que definen como un "buen acuerdo". En público, la portavoz del Govern, Sílvia Paneque, ha afirmado este mediodía que están satisfechos con los resultados del encuentro de la bilateral.
Junts se muestra más beligerante que ERC, que en las últimas horas ha intentado contemporizar: ser exigente sin romper relaciones con el Gobierno y la Generalitat. En el partido de Carles Puigdemont consideran que Cataluña debe recaudar el 100% de sus impuestos -recuerdan que firmaron el acuerdo de Bruselas para la investidura de Pedro Sánchez en el que se plasmaba la voluntad de la autonomía fiscal- y defienden la vía del concierto económico.
En declaraciones a TV3, el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha considero una "tomadura de pelo" el documento de la bilateral. También ha advertido que "de ninguna de las maneras" su partido votará a favor de este acuerdo en el Congreso, donde deben cambiarse tres leyes para que la Hacienda catalana pueda recaudar el IRPF y otros impuestos.
