Uber capta 650 taxis de Barcelona en diez meses
La compañía quiere incorporar taxistas a su aplicación para no quedarse sin conductores si la nueva ley catalana del taxi elimina las licencias de VTC urbanas

Coche de Uber en Barcelona. / ACN

Barcelona
El proyecto de la nueva ley catalana del taxi contempla la eliminación progresiva de las licencias de VTC en la ciudad de Barcelona. Ante la posibilidad de quedarse sin conductores, compañías como Uber han incrementado sus esfuerzos para atraer a taxistas a su aplicación. Desde principios de enero, han captado 654 taxis de la capital catalana, según datos del Instituto Metropolitano del Taxi (IMET). Los taxistas, sin embargo, miran con recelo este trasvase de conductores.
Con la nueva ley, la Generalitat quiere dar absoluta prioridad a los taxistas en los trayectos dentro del Área Metropolitana de Barcelona y obligar a las plataformas a adaptarse y ofrecer servicios de taxis en lugar de las tradicionales VTC, con precios no regulados. Por eso, Uber se ha puesto las pilas con sus campañas de captación de conductores. En tan solo diez meses, los taxis que trabajan con Uber han aumentado un 67%: de 979 registrados en la plataforma en enero a 1.633 actualmente. Además, desde la compañía aseguran que, en el último medio año, más de 2.000 taxis de los aproximadamente 10.500 que hay en Barcelona han realizado algún servicio a través de su aplicación.
“No vale la pena luchar contra el progreso”
Desde la compañía aseguran que un taxista realiza el doble de servicios trabajando con Uber que dando vueltas por la ciudad buscando clientes que levanten la mano. Añaden que quieren ser un socio a largo plazo para el taxi barcelonés y que pueden ofrecer acceso a una amplia base de usuarios, lo que puede servir como fuente adicional de ingresos para los taxistas. Algunos de los que lo han probado están satisfechos. “Tengo el taxímetro por un lado y la aplicación por el otro”, explica Esther, que se incorporó hace meses. “Yo prácticamente ya lo cojo todo por Uber”, apunta.
Esther señala que trabaja en el turno de tarde y noche y que la aplicación le permite ser más eficiente a la hora de recoger clientes y recorrer menos kilómetros con el taxi vacío. “Tienes asegurada una serie de carreras que te van asignando, y así sabes que no pierdes el tiempo dando vueltas”, añade. “Si antes gastaba unos 1.200 euros al mes en gasolina, ahora gasto entre 700 y 800”, calcula. Explica que recoge muchos clientes extranjeros, acostumbrados a usar la aplicación. De hecho, según Uber, un 70% de sus usuarios en Barcelona son internacionales.
“No pueden ir de aliados del taxi”
Algunas asociaciones de taxistas no ven con buenos ojos este traspaso. Admiten que es una decisión libre de cada taxista registrarse o no en Uber, pero reprochan a las plataformas que hagan “competencia desleal al taxi”. “¿Cómo puede ser que una plataforma que dice querer trabajar con el taxi sea cómplice otorgando servicios urbanos a VTC que solo tienen licencia interurbana?”, pregunta Munir Ahoui, portavoz de la Associació Nova Generació de Taxistas (ANGET).
Ahoui también critica que las plataformas suban los precios de los servicios VTC cuando hay alta demanda y pide a los taxistas que tengan todo esto en cuenta antes de empezar a trabajar con ellas. “Nosotros no estamos en contra de modernizarnos”, añade. Por ello, pide que se potencie y se mejore Picmi, una aplicación pública de intermediación entre clientes y taxistas de Barcelona.
¿Qué hacen Bolt y Cabify?
Las otras plataformas de VTC, por el momento, no han hecho grandes movimientos en el mercado del taxi en Barcelona. Por un lado, Bolt tenía 139 taxistas registrados en enero y ahora tiene 134. Por otro, Cabify es la única que conservará unas 250 licencias de VTC urbanas válidas hasta 2038. De momento, no trabajan con taxis en Barcelona, aunque es un modelo que ya han puesto en práctica en Madrid. Un tercio de los 15.000 taxistas de la capital española está registrado en la plataforma. Fuentes de la compañía explican que están satisfechos con el funcionamiento del sistema y que no descartan ampliarlo a otras ciudades, como Barcelona.

Pol Valero Pallarès
Periodista d'Economia a Ràdio Barcelona. Habitatge, banca, laboral... una mica de tot. Llicenciat en...




