Cataluña estudia aplicar la IA en las mamografías para ampliar los cribajes de cáncer

Barcelona

Sobre la mesa del Plan Director de Oncología de Cataluña hay la ampliación del cribaje de cáncer de mama y de colon a personas de entre 45 y 74 años -actualmente se realiza entre los 50 a los 69-, una propuesta que para salir adelante necesitaría de más recursos: más presupuesto y más radiólogos porque el grueso de población en esta franja crece considerablemente. Según el responsable de este plan, Josep Maria Borràs, una opción que se está analizando es la de introducir la IA para hacer los primeros cribados, "nos llevará unos meses, el año que viene, y con esto podremos rebajar la carga de los radiólogos", ha dicho en una entrevista a l'Aquí, Cataluña. La ampliación de las pruebas por franja de edad sigue la recomendación de la Comisión Europea que apuesta por hacerlas extensivas a un mayor rango de población "estamos mirando como aplicarlo mejor (...) queremos hacerlo bien, no creemos en dar mensajes abiertos de 'esto lo haremos' sin realmente poderlo aplicar de forma sistemática", ha explicado. "No es un proceso fácil porque el número de radiólogos es limitado en todas partes", y por eso la aplicación de la IA sería una opción para "rebajar la carga y mejorar la calidad", a pesar de que también ha señalado que "la inteligencia artificial es muy buena diciendo que no tienes nada, pero los falsos positivos también son muchos".

Borràs también ha explicado que es recomendable hacerse una mamografía durante la perimenopausia o la menopausia porque hacerlo antes "aumenta los falsos positivos". En este sentido, el doctor Jaume Padrós, expresidente del colegio de médicos de Barcelona, ha querido remarcar que un positivo en una prueba de cribado no es una prueba diagnóstica, "indica que tienes más probabilidad, no es una certeza, se tienen que hacer más pruebas". Padrós, que proviene de una familia de médicos, ha destacado que en los últimos años la conciencia de la autoexploración ha cambiado mucho, "cada vez está más extendido y se ha perdido el miedo a la consulta mínima". Una exploración que pasa por "palparse el pecho de forma sistemática y circular, cubriendo todas las áreas y haciéndolo cada mes", añade Borràs.