Del Madrid del siglo de Oro a Rosa Montero: Recomendaciones en El anaquel de los libros
Los escritores Gonzalo Arjona y José Luis Labad recomiendan varias lecturas
Del Madrid del siglo de Oro a Rosa Montero: Recomendaciones en El anaquel de los libros
Móstoles
¿No saben que leer? En “El anaquel de los libros” los escritores Gonzalo Arjona y José Luis Labad nos han recomendado dos libros.
Por una parte, Pepe Labad nos ha hablado de su última adquisición en la Feria del Libro: La vida canalla del Madrid del Siglo de Oro de Antonio Pasies Monfort. El autor asegura que “realmente el siglo de Oro se debería de haber llamado, atendiéndonos a la historia, el Siglo de Hojalata, si no fuese porque a unos plumillas -Cervantes, Lope, Góngora, Quevedo ...-, que vivían por el barrio de las Letras, les dio por escribir la mejor literatura de todos los tiempos, lo que hizo que el término Siglo de Oro fuese consagrado, según criterios artísticos y literarios, como el gran periodo de la historia de España”.
También destaca que “con este libro pretendemos descender a los bajos fondos para tratar de la mala vida en el Siglo de Oro madrileño; la vida perdularia y canalla que llevaban desde los reyes, la nobleza y la Iglesia que era más humana que romana -hasta el pueblo, sobre todo el pueblo; de sus vicios, sus usos amorosos heterodoxos e inmorales, la violencia y las cárceles; los pícaros, jugadores, ladrones y asesinos a sueldo”.
Por su parte, Gonzalo Arjona ha recomendado el libro La buena suerte de Rosa Montero. Un libro que hablar “del Bien y del Mal, y de cómo, pese a todo, el Bien predomina”.
¿Cuál es la trama dl libro?
¿Qué impulsa a un hombre a bajarse anticipadamente de un tren y ocultarse en un pueblo de mala muerte? ¿Quiere recomenzar su vida o pretende acabar con ella? Tal vez esté huyendo de alguien, o de algo, o incluso de sí mismo, y el destino le ha traído a Pozonegro, un antiguo centro hullero que ahora agoniza. Por delante de su casa pasan trenes que pueden ser salvación o condena, mientras los perseguidores estrechan el cerco. La perdición parece estar más próxima cada día.
Pero este hombre, Pablo, también conoce gente en aquel lugar maldito, como la luminosa, incompleta y algo chiflada Raluca, que pinta cuadros de caballos y tiene un secreto. Allí todos arrastran algún secreto, algunos más oscuros y peligrosos que otros. Y algunos simplemente ridículos. También hay humor en ese pueblo.