"La demolición de Casa Blanca y el camino hacia la vulgaridad"
El Grupo en Defensa del Patrimonio Complutense denuncia la destrucción del patrimonio material de la ciudad con la próxima demolición de una particular edificación en la finca Casa Blanca.
Alcalá de Henares
El Grupo en Defensa del Patrimonio Complutense ha alertado de una próxima demolición que contribuirá a la pérdida del patrimonio material de Alcalá de Henares. La demolición de la finca Casa Blanca llegará en cuestión de semanas porque ya hay un proyecto en firme de una constructora para iniciar la transformación de este emblemático espacio y convertirlo en chalets. La finca —situada en la avenida de Meco, justo enfrente del antiguo pabellón Ruiz de Velasco— cuenta con dos edificaciones que no dejan a nadie indiferente por su diseño y ubicación. Desde el Grupo en Defensa del Patrimonio explican que se trata de una construcción particular que, desde la década de los 40, ha destacado por su porte y elegancia convirtiéndose en una de las fincas agropecuarias más destacadas de la ciudad. Destacan sus imponentes puertas, los aleros decorados de sus cubiertas o las "magníficas rejas de la fachada".
A pesar de que no hay marcha atrás porque el proyecto urbanístico ya ha pasado por la Junta de Gobierno y los chalets ya figuran —con precio y características— en la página web de la constructora, desde el Grupo en Defensa del Patrimonio hacen un llamamiento a la desesperada para frenar este daño patrimonial y cargan contra el equipo de Gobierno para que paralice la pérdida de esta edificación tan singular. Para el grupo, esto es "un paso urbanístico más de la peculiaridad a la vulgaridad". Según su portavoz, María Jesús Vázquez Madruga, se trata de "la única construcción singular que hay en toda la zona" y aunque se quiera construir chalets en el área, cree que convendría mantener la casa de la finca intacta y "venderla como una vivienda muy especial o convertirla en un centro social".
Para la portavoz del grupo, el ayuntamiento complutense tiene responsabilidad y competencia en esta materia: "Si no hubieran aprobado la demolición, esa vivienda no se derribaría". Desde el grupo solicitan el indulto de esta edificación que aporta valor a la ciudad y ponen el ejemplo del Palacio Laredo, el cual estuvo cerca de ser demolido cuando se diseñó el urbanismo actual del paseo de la estación con los bloques de pisos que lo rodean. Vázquez Madruga afirma que para la destrucción de Casa Blanca ya no hay marcha atrás pero recuerda que el retablo del siglo XVII de la capilla de El Encín aún puede montarse de nuevo, aunque el espacio sea hoy una sala de reuniones.