Importante figura de los auxiliares de acompañamiento en Móstoles

Móstoles

Desde Móstoles Desarrollo se está realizando este proyecto donde se han contratado a 18 personas desempleadas de larga duración que ahora realizan labores de acompañamiento a personas que lo necesitan. Les dan apoyo en situaciones cotidianas como acudir al centro de salud, hacer la compra o simplemente pasear.

Hablamos con Gema García, coordinadora del servicio de acompañamiento, y nos explica que desde la oficina se hace una preselección de las personas que han solicitado el trabajo de auxiliar de acompañamiento. De estas se seleccionan 18 que son las que están actualmente contratadas, y conforman el equipo de auxiliares de acompañamiento.

Con respecto al servicio, explica que puede ser solicitado por mayores o personas que presenten alguna dificultad, y “en función de lo que necesiten así vamos haciendo”. Además, nos indica que “la mayoría de los acompañamientos son de paseos, aunque también hay a citas médicas o a realizar otras gestiones”.

Para solicitar este servicio han habilitado dos números de teléfonos 643 465 580, y 643 465 769. Cuando llaman, les atiende María José Barreiro, con la que también hablamos. Ella nos explica que lo primero que hace es “informar sobre el servicio, sino lo conocen, si están enterada,” además, le coge los datos como la dirección, la edad, etc. Seguidamente, le confirman el auxiliar, y la hora a la que pasar a buscarle, ya que “no entramos en los domicilios”.

Este proyecto se puso en marcha cuando María José Barreiro era desempleada de larga duración y explica que “fue una sorpresa que me llamarán”. Su jornada es de “8 a 15 de la tarde”, y explica que ha tenido un curso de formación “yo creo que ha sido un mes y pico, dos meses”. María José se emociona, ya que Gema García explica que hay personas que pueden llevar perfectamente 15 años sin trabajar o más, por lo que para ellos esto “ha sido un aliciente porque un poco es retomar su vida laboral, por lo que su autoestima está a tope.”

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Les gustaría que hubiese más hombres, ya que solo disponen de uno. Gema García explica que la mayoría de ellas, estaban en paro por “una decisión personal o por sus circunstancias que a lo mejor tenían su vida organizada y se quedaron embarazadas y decidieron cuidar a la familia”. Después de tantos años, se preguntan “y ahora, ¿Qué hago con mi vida?”. María José afirma que se levanta “a las 6 y media de la mañana y está feliz: “se me hace corto el trabajar”.

María José Rodríguez, una de las auxiliares, llevaba 30 años o más sin trabajar y con pocas esperanzas de trabajar de su profesión, auxiliar de farmacia. Ahora es auxiliar y afirma que le encanta “el trato con las personas y que aquí se aprende mucho”.