Forspoken, una aventura exuberante entre Nueva York y Athia
El nuevo juego de rol de mundo abierto para PS5 y PC nos introduce en el fantástico mundo de Athia con gran calidad visual
SER Jugones 9x21: Forspoken, una aventura exuberante entre Nueva York y Athia
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Fuenlabrada
Forspoken, obra de Luminous Productions y Square Enix para PS5 y PC, no esconde la inspiración de su planteamiento en Alicia en el país de las maravillas. Al igual que en el libro de Lewis Carroll su protagonista acaba sin saber bien cómo en un mundo extraño y muy diferente al suyo. La ventaja es que en Forspoken podemos recorrer a nuestro antojo sus bastos y vistosos paisajes de mundo abierto, además de modelar nuestro personaje y estilo de combate en un título a medio camino entre la aventura en tercera persona y el rol.
En Forspoken Frey Holland vive una dura situación personal en Nueva York. Está al límite, después de crecer abandonada por sus padres y buscarse la vida en las calles con los consecuentes problemas con la justicia. El brillo de un brazalete dorado se convierte en su particular madriguera de conejo y se ve teletransportada a un mundo diferente: medieval fantástico, asolado por una neblina que todo lo corrompe y plagado de peligros y desconfianza.
Frey llega a Athia pero no lo hace sola; está acompañada por ese mismo brazalete que se ha soldado a su brazo, y además tiene la capacidad de comunicarse con ella. Frey y ‘Cepo’, como ella lo llama, se convierten en compañeros forzados de viaje. Su destino, además de responder muchas preguntas, es encontrar la forma de volver a casa. Por el camino ‘cepo’ nos facilita mucho las cosas con su radar para localizar objetos, aunque no es obligatorio activarlo continuamente -pero es difícil resistirse-.
Impacto visual
El juego nos golpea en la cara con la inmensidad de sus paisajes la primera vez que salimos al mundo abierto de Athia, como lo hicieron en su día juegos como Oblivion. Nos vamos a detener muchas veces simplemente para rotar la cámara y ver la exuberancia de nuestro alrededor. Además del atractivo y diversidad de sus cuatro territorios (boscosos, desérticos o rocosos), una de sus principales bazas es su ágil sistema de movimiento: un parkour semiautomático que solo nos exige mantener apretado un botón y orientarnos hacia el siguiente saliente u objetivo, con la única limitación de la barra de resistencia.
El mundo de Athia está corrompido por un miasma conocido como ‘desgarro’, y eso provoca que sea muy hostil. Vamos a combatir mucho y contra un número cada vez mayor de enemigos. Para ello disponemos de hechizos de ataque y de apoyo, pero no de armas. Lo bueno es que según ganemos experiencia podremos desbloquear un buen número de variantes y cumplir ciertos desafíos para ganar recompensas por nuestras hazañas. El parkour también está presente en los combates, así como muchos (muchísimos) efectos de luz y explosiones que pueden desorientarnos por momentos. Esta confusión la sentimos en varios momentos, también por algunas decisiones en la evolución de la historia.
Elementos roleros
Además de la personalización del estilo de combate seleccionando hechizos podemos modificar las características de nuestra protagonista mediante las capas que utiliza como vestimenta, los collares que utiliza como accesorios y los imaginativos esmaltes que luce en sus uñas. Aquí yace el principal elemento de rol del juego, que podía ser más profundo en cuanto a la definición de la personalidad o la relación con otros personajes más allá de ‘cepo’, nuestro pepito grillo particular, con un discutible sentido del humor en la línea Pixar algo forzado. Sin embargo el personaje de Frey y su abrupta llegada a un mundo extraño sí está bien construido en base a sus reacciones y comentarios.
Visualmente Forspoken llama poderosamente la atención, sobre todo por la inmensidad y riqueza de sus paisajes, y por las animaciones de su protagonista durante el parkour. Pero es cierto que algunas expresiones faciales y el escaso nivel de detalle de los personajes secundarios desentonan un poco. El juego cuenta con tres modos gráficos para priorizar la fluidez o el detalle gráfico, y las voces cuentan con doblaje en inglés y subtítulos en español. Establecer una duración media es bastante complicado, ya que ciñéndonos a la historia principal podemos completarlo en unas quince horas, pero los centenares de misiones secundarias disponibles pueden multiplicar este número fácilmente por cuatro. Sobre Forspoken, su mundo y sus posibilidades hemos conversado con Jaime González, jefe de producto de Square Enix para la distribuidora Plaion en España. Hasta aquí el SER Jugones de esta semana, pasadlo bien.