Las olvidadas que ilustraron la Historia Natural, un nuevo capítulo de la invisibilidad forzosa de la mujer en la Ciencia
La Universidad Autónoma de Madrid dedica su nueva edición de Ciencia en Casa de Fieras (El Retiro) a las mujeres que aportaron su conocimiento e investigación a las Ciencias Naturales, pero nunca fueron reconocidas
Elisa Garrido, profesora especializada en Arte y Ciencia de la Universidad Autónoma de Madrid, habla sobre la mujer en la ilustración botánica y su olvido en la Historia.
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Tres Cantos
La alemana Maria Sibylla Merian, naturalista, exploradora e ilustradora científica o Anne Pratt, británica dedicada a la botánica y su ilustración, son algunos de los nombres que tenían que haber figurado en los libros de Ciencias del siglo XVIII o XIX, y en tratados de Botánica, en concreto, pero no es así. A duras penas han pasado a la Historia y no son conocidas nada más que por expertos. Son algunos de los casos de mujeres que con conocimientos e inquietudes sobre las plantas, sólo pudieron dedicarse a la ilustración. De ellas hablará el próximo 23 de febrero Elisa Garrido, profesora especializada en Arte y Ciencia de la Universidad Autónoma de Madrid, en Tres Cantos, que un año más organiza Ciencia en Casa de Fieras, en el Parque de El Retiro de Madrid, para abordar el papel de las mujeres que ilustraron la Historia Natural.
Fueron, según cuenta Garrido, mujeres que se dedicaban a pintar flores, con un interés que partía de la Ciencia y la Botánica, algunas llegaron a ilustrar importantes trabajos científicos realizados por hombres, pero en ellos nunca aparecía el nombre de la autora de esas necesarias y precisas ilustraciones.
Esta ‘desaparición forzosa’ de la mujer en este ámbito, como en muchos otros, en unos tiempos donde su papel se reducía a la casa y los hijos, empezó a cambiar, dice la profesora, con la llegada de los primeros movimientos feministas y de la mujer al mundo laboral. Pero hasta entonces, muchas de las ilustradoras de botánicas crearon libros, ilustraron estudios, realizaron expediciones, llegando algunas hasta Australia, para pintar cosas relacionadas con la botánica, aunque de muchas ni llegamos a conocer su cara.
Garrido reivindica también, ya en nuestro país, el papel de las ‘trementineras’ que actuaban por la zona del Pirineo catalán, mujeres grandes conocedoras de la naturaleza y del poder curativo de las plantas que recogían y luego ‘prescribían’ a sus vecinos. A veces eran consideradas como brujas, aunque en general “estaban bien vistas por la población”, cuenta la profesora.
La iniciativa de la UAM que se realizará el próximo 23 de febrero busca que los docentes salgan del ámbito académico y de las aulas para compartir lo que hacen con la sociedad.
