Ayuso responsabiliza a los alcaldes socialistas del fracaso del Plan Vive
La presidenta de la Comunidad de Madrid, que prometió construir 15.000 viviendas en esta legislatura, denuncia que “los ayuntamientos las han ido bloqueando de manera insensata”
Madrid
El próximo martes se disolverá la Asamblea de Madrid y se convocarán las nuevas elecciones autonómicas. Ayuso, como el resto de candidatos, tendrá prohibido a partir de ese momento hacer balance de gestión o inauguraciones; así que la presidenta regional y sus consejeros se prodigan estos días en actos públicos para visibilizar su gestión. El problema es que muchos de los proyectos prometidos acumulan serios retrasos, así que en esas visitas se está viendo mucho socavón y poco corte de cinta.
La agenda de la presidenta –la institucional y la de partido- estaba reservada hoy a promocionar el Plan Vive en dos localidades del sur de la región: Getafe y Alcorcón. El problema es que el mencionado proyecto de momento solo es un conjunto de solares en construcción repartidos por la Comunidad de Madrid.
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“Consiste en la construcción de 25.000 viviendas para ofertarlas en alquiler a jóvenes y familias madrileñas, adaptando el arriendo a su nivel de renta y a si tienen hijos y cuántos”, explicaba sobre el plan la propia Ayuso el 6 de mayo de 2019. El anuncio de campaña iba con la promesa de entregar las primeras 15.000 a lo largo de la legislatura. Cuatro años después no se ha finalizado ni un solo piso, así que la presidenta se ha hecho la foto en un descampado en obras.
No se ha entregado ninguna de las 6.336 viviendas tramitadas
Ayuso, a modo de balance de su proyecto inconcluso, ha reconocido que “el camino no ha sido fácil”. Entre esas adversidades ha citado la crisis de materiales, la pandemia “y retrasos administrativos injustificados de entre 11 y 14 meses en algunos ayuntamientos”, ha enumerado la presidenta regional. Es la forma que ha encontrado Ayuso de admitir el incumplimiento de los plazos que ella misma se había impuesto, pero achacándoselos a otros.
La dirigente popular, por el contrario, ha omitido otros retrasos achacables a su gestión y la de su equipo. Ayuso tomó posesión el 19 de agosto de 2019, pero no sacó a licitación las parcelas del Plan Vive hasta el 19 de enero de 2021, 17 meses después de su llegada a la Puerta del Sol. El programa está concebido como un modelo de colaboración público-privado, en el que la Comunidad cede temporalmente el suelo y la empresa privada levanta los pisos y los explota –por debajo del precio de mercado- durante el periodo de concesión.
El problema es que la convocatoria no suscitó el interés en el mercado que los dirigentes madrileños esperaban. De las 6.646 viviendas que componían esa primera fase, 1.447 quedaron desiertas. Es decir, casi uno de cada cinco pisos que proyectó la Comunidad de Madrid se quedaron en papel mojado. Hace apenas un mes –el 20 de febrero de 2023- se adjudicó la segunda fase del Plan Vive, en la que se adjudicó la promoción de otras 1.137 viviendas. En total, se ha tramitado la construcción de 6.336 viviendas, aunque no se ha entregado ni una sola llave.
El compromiso de Ayuso llegará cuatro años tarde y será cuatro veces más pequeño
Con estas cifras, Ayuso ha vuelto a rebajar su promesa electoral de 2019. La ahora también candidata popular ha asegurado que “la próxima legislatura será la de la entrega de las llaves en mano”, aunque la cifra se quedará muy lejos de la promesa inicial. La presidenta ha pronosticado que entre 2023 y 2027 se construirán en la región 35.000 viviendas, “a las que se suman 6.000 del Plan Vive”. Es decir, se entregarán las ya tramitadas. Ni una más. Si se cumple, el compromiso de Ayuso llegará cuatro años tarde y será cuatro veces más pequeño que el anunciado en 2019.
“Nos hubiera gustado y hubiéramos tenido la oportunidad de construir antes, si no hubiera sido porque los ayuntamientos los han ido bloqueando de manera insensata”, ha lamentado Ayuso, que habitualmente califica las críticas del Gobierno central a su gestión como “ataques intolerables de una administración superior a una inferior”. A continuación, la presidenta ha comenzado a enumerar municipios: Móstoles, Getafe –desde donde hablaba-, Alcalá de Henares y San Sebastián de los Reyes. Todos tienen en común que están gobernados por un alcalde socialista.
Muchos de los aludidos han salido inmediatamente a negar la intencionalidad política que ha deslizado Ayuso en su rueda de prensa. Fuentes municipales del Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes han explicado a SER Madrid Norte que "solo existe retraso en la licencia de las 80 viviendas que la Comunidad de Madrid pretende construir en Fresno Norte, porque en la parcela hay una encina centenaria que se eliminaba en el proyecto inicial y la ley autonómica no permite su tala".
Los datos tampoco avalan la declaración de Ayuso, ni tampoco su propia agenda institucional. De las 6.336 viviendas tramitadas, casi cuatro de cada diez –2.418- están previstas en ayuntamientos regidos por el Partido Popular: Madrid capital, Colmenar Viejo, Tres Cantos, Torrejón de Ardoz y Boadilla del Monte. En ninguno de esos municipios se ha entregado ni un solo piso. Ni siquiera acogen los proyectos más avanzados. Según la propia agenda del Gobierno regional, Ayuso visita también este lunes “la promoción más avanzada del Plan Vive”, que se ubica en una parcela de Alcorcón, donde gobierna la socialista Natalia de Andrés.
Javier Alonso
Periodista. Licenciado por la Facultad de Ciencias de la Información de la Univesidad Complutense de...