La Comunidad de Madrid quiere que el personal sanitario de las residencias trabaje más horas para cubrir las vacaciones de verano

La Comunidad de Madrid quiere que el personal sanitario de las residencias trabaje más horas para cubrir las vacaciones de verano. De hecho, en los tablones informativos para las plantillas de las 25 residencias públicas han aparecido estos días unos carteles que firma la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS) y en los que se dice que se ofrece al personal sanitario, al diplomado en enfermería (DUE) y al personal técnico en cuidados auxiliares de enfermería (TCAE) un segundo contrato laboral temporal de, como máximo, 30 horas semanales. Las plantillas ya realizan una jornada laboral de 37 horas y media a la semana.

En el PSOE denuncian el enfado de los trabajadores por la falta de planificación. "Una persona va a trabajar en una semana 67 horas y media, es una barbaridad. Una fatiga impresionante para los trabajadores que están trabajando con personas vulnerables, que no son muebles, que son personas. Que necesitan sus cuidados y que se pongan los cinco sentidos en lo que se está haciendo", explica José Ángel Chamorro, secretario de Atención a la Dependencia del Partido Socialista de Madrid.

"Están pidiendo hacer contratos complementarios a personal que está fijo en plantilla, que tiene sus horarios de trabajos semanales. Les hacen contratos de treinta horas más cuando trabajan con personas vulnerables. Es una fatiga impresionante", dice Chamorro.

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Los socialistas creen que el Gobierno del Partido Popular, encabezado por la presidenta Isabel Díaz Ayuso, no se toma en serio la gestión de las residencias públicas y que la nueva consejera de Asuntos Sociales, Ana Dávila, no debería permitirlo. "Lamentamos, una vez más, que la Comunidad de Madrid no se tome en serio la gestión de las residencias. El Gobierno no es nuevo, algunas personas sí, pero el Gobierno no. La propia consejera estaba en la comisión de Políticas Sociales y supongo que estaría al tanto de lo que está pasando y debería cortarlo inmediatamente", concluye Chamorro.

Los argumentos que utilizan en la Consejería de Asuntos Sociales y que han transmitido a Radio Madrid es que se trata de "una opción voluntaria" que se pone en marcha "para adecuar la plantilla a las vacaciones de verano" y que "la atención en las residencias va a estar asegurada".