Cervantes vuelve a tener pluma en Alcalá de Henares
La rápida restauración del monumento le ha costado 2.000 euros a las arcas municipales. El Ayuntamiento de Alcalá de Henares recuerda que los atentados contra el patrimonio pueden conllevar penas de cárcel
Alcalá de Henares
Han durado apenas 48 horas los trabajos de reposición de la pluma que algún vándalo partió y se llevó el pasado mes de junio del monumento al autor de El Quijote en la plaza que lleva su nombre, la de Cervantes. Afortunadamente, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares ya contaba con una copia de este elemento vandalizado en otras ocasiones, la anterior en el año 2007. La pluma no tiene un alto valor histórico y no es, de hecho, la original que tuvo la estatua pero es, sin duda, un elemento icónico de la ciudad complutense. Fue, de hecho, en aquella ocasión cuando el ayuntamiento aprovechó para cambiar el aspecto de la escultura "pasando de tener un aspecto blanquecino, al recuperar las pátinas, a ser negra, y también se restituía la pluma, por ser la anterior de un tamaño desproporcionado", explica el consistorio.
El concejal de Patrimonio Histórico, Vicente Pérez explica que la restauración, encargada a Laura Riesco y Pilar Sendra, cuyo taller posee el molde de la pluma, ha podido ser ejecutado según lo previsto, "de forma que nuestro paisano ya cuenta con este importante atributo que le caracteriza como escritor".
Delitos contra el patrimonio penados con cárcel
Este tipo de ataques al patrimonio municipal, más allá de lo estético, suponen un perjuicio económico para las arcas públicas. En este caso el coste, menor, ha superado los 2.000 euros "pagado con dinero de todos", señala el edil quien hace "un llamamiento para que aquellas personas que puedan presenciar este tipo de actos, lo pongan inmediatamente en conocimiento de las autoridades, para evitar que actuaciones tan nefastas como estas se vuelvan a repetir”.
El ayuntamiento alcalaíno explica que este tipo de acciones o actos vandálicos, si son entendidos como un delito contra el Patrimonio Histórico, pasan a ser juzgados por el Código Penal, lo que supone penas de prisión de 6 meses a 3 años, e importantes multas económicas.
Para el futuro, el consistorio ha encargado a las restauradoras una nueva copia del molde utilizado, para conservarlo en el ayuntamiento de modo que, en caso de sufrir otro acto vandálico, se pueda restaurar la pluma y tener siempre la seguridad de que la ciudad cuenta con el elemento para su reposición.
Javier Galicia
Licenciado en Periodismo. En la antena de SER...