¿Cómo nació el mundo según los celtas?
La existencia de la civilización celta abarca desde el siglo VIII a.C. al I a.C, dejando tras de sí una gran herencia mitológica y cultural que llega hasta el norte de España
¿Cómo nació el mundo según los celtas?
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Comunidad de Madrid
Dentro de las culturas europeas, hay algunas que parecen haber gozado de una gran popularidad durante muchos años. De hecho, algunas cosas de las que las personas disfrutan hoy en día, como la música, están relacionadas con la herencia que han dejado tras de sí. Un claro ejemplo es la perteneciente a la civilización celta, cuya existencia abarca del siglo VIII a.C. al I a.C, y de la cual aún se puede encontrar elementos mitológicos y culturales incluso en el norte de España.
Un pueblo que tuvo contacto con Roma
El pueblo celta se componía de diferentes tribus que vivieron en la parte central y occidental de Europa, hasta la llegada de los romanos y de su posterior desaparición. Se caracterizaba por una gran ferocidad en la lucha y por costumbres y lenguas compartidas entre esas tribus. Los celtas también eran muy hábiles en el trabajo del hierro y grandes jinetes. Además, la mujer tenía un papel muy importante en su sociedad, alcanzando puestos de líder y luchando al lado de los hombres.
En lo que respecta a su religión, cabe destacar que eran un pueblo politeísta, cuyo líder espiritual, el druida, poseía potestad jurisdiccional. Además, hubo algunas tribus que tuvieron un estrecho contacto con Roma, como los galos y los celtíberos. Sin embargo, irónicamente, fue a través de fuentes romanas y cristianas coetáneas, que se conocen detalles sobre sus creencias.
Un origen con diferentes versiones
Por otro lado, su visión del origen del mundo se basa en diferentes leyendas, algunas de las cuales relatan que, en un principio, no había nada, a excepción de la tierra y el mar; y, donde ambos se encontraban, nació una yegua, de un color tan blanco como la espuma, que se llamaba Eiocha. Eso marcó el principio de todo, especialmente tras dar a luz a Cernunnos, el primer dios, quien se apareó con su madre y engendró a más deidades, quienes, a su vez, por sentirse solos al no tener a nadie que les pudiera rendir culto, tomaron la decisión de crear a la primera pareja humana con madera de roble.
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