El misterio de la Sábana Santa de Torres de la Alameda

Es posible que muchos madrileños y madrileñas desconozcan que en Madrid hay una Sábana Santa. Y está en nuestra comarca. En concreto, en Torres de la Alameda. En la iglesia del pueblo se resguarda una reliquia única: una copia de la mítica Sábana Santa de Turín que data del año 1620. El origen de la sábana torresana está envuelto en leyenda. Unos apuntan a que fue un obsequio de la realeza española, de la Casa de Saboya, a un noble local. Otros, que la trajo un religioso desde tierras lejanas. Sea como fuere, la tela estuvo en contacto directo con el sudario original y esto le confiere un halo de misticismo. La Sábana Santa de Torres de la Alameda ha escapado milagrosamente a la destrucción en varias ocasiones. Durante la Guerra Civil, cuenta la leyenda que los lugareños la escondieron en un basurero para salvaguardarla. Incluso sobrevivió a un voraz incendio que calcinó la caja en la que se encontraba guardada, pero que no quemó el lienzo. Aunque ésta de Madrid no es la única copia de la Sábana Santa de Turín. Se dice que hay más de veinte copias. El Santo Sudario de Oviedo es una de las más importantes, y se cree que podría haber cubierto la cabeza de la misma persona que envolvió la sábana de Turín. La original, la de Turín, ha sido investigada e incluso sometida a análisis científicos para datarla, establecer su origen y saber si, realmente, puede ser, como muchos creen, la sábana que envolvió el cuerpo de Cristo. Ante esto, existen dos versiones extendidas. Por una parte, se cree que el sudario es la tela que se colocó sobre el cuerpo de Jesucristo en el momento de su entierro, y que la cara que se aprecia es la suya. Otras personas más incrédulas piensan que el paño se creó en la Edad Media. Las pruebas del carbono 14 se realizaron a la Sindone en 1988, cuando la Santa Sede lo autorizó. La prueba se llevó a cabo en tres laboratorios distintos y todos coincidieron en que la tela data de entre los años 1260 y 1390. En el año 1958 el papa Pío XII permitió que la imagen se relacionara a la religión católica hacia la Santa Faz de Jesús. Sin embargo, la iglesia nunca ha manifestado de forma oficial su aceptación o rechazo hacia la Sábana Santa. La Sábana Santa de Torres de la Alameda se expone sólo tres días al año, en Semana Santa. Por su parte, para ver la Sábana Santa de Turín hay que esperar a que lo decida el Papa. Sólo se puede ver cuando el Pontífice lo establece, y se organiza un periodo en el que puede ser visitada. Por motivos de conservación, mientras esto no ocurre lo único que puede verse es el arcón de madera que la guarda, y una réplica del sudario colocada sobre éste.