Vox dice sin pruebas que las "cloacas del Estado" están detrás de las protestas violentas en Madrid

La portavoz parlamentaria de Vox en Madrid, Rocío Monasterio, atribuye a las "cloacas del Estado" los episodios de violencia durante la manifestación de este martes a las puertas de la sede federal del PSOE, en la calle Ferraz. Desde el primer minuto de la manifestación, los ultras asumieron un papel protagonista al colocarse en primera línea de las vallas que protegían la sede del PSOE. Allí, decenas de radicales vestidos con estética ultra, encapuchados y con bengalas, entonaban cánticos habituales de la extrema derecha. Algunos, posaban orgullosos ante las cámaras haciendo el saludo nazi y uno de ellos llegó a clamar a voz en grito “Yo soy nazi”.

En los pasillos de la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio ha definido lo sucedido como "gravísimo" y ha condenado la actuación de los radicales. "Una minoría de violentos intentó tomar el protagonismo, la gente tiene derecho a estar preocupada y a salir a las calles con libertad de expresión para decir que no quieren que nos entreguen en manos de los independentistas". Sin embargo, la líder ultra atribuye sin pruebas la violencia a agentes infiltrados por el Gobierno. "Sospechamos que son las cloacas del Estado que quieren reventar manifestaciones de miles de españoles". Hasta en dos ocasiones, los periodistas le han preguntado qué pruebas tiene para justificar esa afirmación, pero Monasterio ha evitado responder.

Antes, durante el pleno, la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha empezado su intervención condenando con contundencia los actos violentos de la noche del martes frente a Ferraz. Pero, al mismo tiempo, ha animado a mantener la presión en las calles con movilizaciones contra la amnistía. "Yo con los ultras no voy ni a la vuelta de la esquina", ha dicho en el Pleno celebrado en la Asamblea de Madrid, donde ha mostrado su respaldo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, ha criticado los "actos vandálicos" que se produjeron y ha defendido a quienes "se manifiestan pacíficamente en defensa de la democracia".

Ayuso ha llegado a "celebrar", literalmente, las manifestaciones frente a un Pedro Sánchez, al que el PP ha vuelto a caricaturizar como un autócrata. Unos insultos que le afean desde la izquierda porque dan una coartada -dicen Mónica García y Juan Lobato- a los violentos.