Ser mujer y abogada, la diana habitual del machismo que provoca un 67 por ciento de quejas
El Colegio de Abogados de Madrid aborda este grave problema profesional con una nueva área de intervención
Madrid
Casi 7 de cada 10 incidentes que los letrados madrileños registran ante su colegio profesional provienen de mujeres abogadas que son amenazadas, acosadas y vejadas únicamente por su condición de mujer. Dato estremecedor para una profesión que se dedica a defender los derechos y las libertades de sus clientes.
Son abogadas que tienen que sufrir videos amenazantes en las redes sociales, acoso virtual, trato vejatorio o incluso comprobar como las ruedas de su coche han sido pinchadas. Por eso el Colegio de Abogados de Madrid ha lanzado una campaña para denunciar esta situación a la vez que se ha creado un área específica para apoyar a estas víctimas.
Victimas como Amparo Martínez, letrada del turno de oficio cuyo cliente le provoco un problema psicológico que duro 2 años y que puedo ser superado con la ayuda de especialistas clínicos. Esta abogada casi llega al colapso porque se vio incapaz de defenderse de esas agresiones verbales.
Otras abogadas también han ofrecido su testimonio y han relatado episodios vividos como consecuencia del acoso de justiciables. "Puedo hablar en primera persona. He recibido tantas amenazas con vídeos en los que aparece una mujer a la que estaban asfixiando, la estaban ahogando, cogiéndola por el cuello con la mano izquierda y golpeándola con la mano derecha, mientras la mujer lloraba y debajo de la imagen ponía que eso es lo que me iban a hacer a mí", ha denunciado una de las letradas.
Muchas abogadas siguen sufriendo situaciones discriminatorias, algunas de ellas "se suelen materializar en micromachismos y otras se convierten en una auténtica violencia".
Situaciones tremendamente dolorosas por el machismo social. Una de esas letradas ha sido concluyente: "Estas situaciones de micromachismo, por ejemplo, las he vivido con determinadas etnias, como pueden ser los gitanos o, por ejemplo, también me sucedieron con algunos ciudadanos chinos, los cuales se negaron a que yo les asistiese en una de mis guardias".
Cuando el Colegio de Abogados de Madrid recibe una denuncia de este tipo activa el protocolo contra las agresiones, protocolo dirigido a proteger a la abogada con todos los argumentos de la legislación.