"¿Cómo me pueden decir que esto no existe?": sanitarias responden a los negacionistas de la violencia machista

Madrid

¿Cómo me pueden decir que esto no existe? Lo ves, es real. Al lado, en un box de la UCI de Trauma y Emergencias del  Hospital 12 de Octubre de Madrid, el equipo de trasplantes ultima el informe. Hay una potencial donante. Mujer a la que su expareja, padre de su hijo,  menor de edad,  había apuñalado la tarde anterior en el cuello y el abdomen.

Iluminada Palomino, lleva 17 años trabajando en este hospital. Enfermera en esta UCI, coge aire antes de responder a qué se le pasa por su cabeza cuando escucha que la violencia de género, la violencia machista, no existe. "Eso te supone muchas discusiones con amigos o con familiares que sacan la típica frase de: hay denuncias falsas. Cuando vives esto me enerbo, porque es algo que ves, que existe, y no tendría que haber visto ninguno en mi carrera profesional".

"Es algo tangible, añade su compañera María Orejana, una mujer joven que ha perdido la vida porque alguien se la ha sesgado". En poco más de un mes,  dos mujeres de 36 y 40 años, las dos con hijos menores de edad y las dos vecinas de Móstoles perdían la vida a consecuencia de las cuchilladas, en un caso de su ex pareja, en otro de su marido. A las dos las intentaron salvar en esta UCI, pero las cuchilladas que recibieron habían sido certeras.

"Parece que con los años te haces más insensible a estas cosas, pero no es verdad. La coraza es gorda pero hay cosas que no se pueden superar, y esta es una de ellas". Ara Murillo, supervisora de enfermería, también ha visto de todo en una unidad como esta, pero reconoce "jamás te puedes acostumbrar a esto, no hay derecho".

Esa mañana coinciden en la unidad violencia machista, accidentes de coche, de patinete e intentos de suicidio. La experiencia como profesionales les da herramientas, estrategias de "autoprotección". "Hay momentos en los que tienes que salir, coger aire o beber agua para volver y poder seguir". Esta ha sido una de estas mañanas.