El 'timo nigeriano' del militar: así es la estafa amorosa que acabó en el asesinato de tres hermanos en Morata de Tajuña
Amelia y Ángeles creían tener un noviazgo a distancia con dos militares estadounidenses destinados en Afganistán
La Guardia Civil está investigando las causas de los asesinatos de los tres hermanos de avanzada edad —Amelia, de 68 años; Ángeles y Pepe, de 70— cuyos cadáveres han sido hallados este jueves en una vivienda de Morata de Tajuña (Madrid). La principal hipótesis que se baraja es un ajuste de cuentas por una deuda relacionada con una estafa amorosa.
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En concreto, se sospecha que los septuagenarios habrían sido víctimas de una versión renovada del clásico 'timo nigeriano', que consiste en hacerse pasar por el poseedor de una supuesta fortuna y seducir a una víctima para que pague una cuantía de dinero por adelantado como condición para luego hacerle llegar una cantidad mayor.
¿Cómo fueron engañadas las hermanas de Morata de Tajuña?
Los tres ancianos estaban solteros y sin hijos y, aunque eran originarios de Torre de Juan Abad (Ciudad Real), vivían desde hace años en la localidad madrileña. Tal y como relata a 'El País' un amigo íntimo de las víctimas, Amelia y Ángeles habían conocido a dos hombres a través de Facebook —red social de la que eran asiduas— y habían iniciado una relación a distancia con ellos. Los hombres decían ser dos militares estadounidenses destinados en Afganistán, algo que ya sonó raro a amigos y familiares.
Por si fuera poco, las mujeres comenzaron a enviarles dinero después de que los supuestos militares les pidieran ayuda para cobrar una herencia. A pesar de las advertencias de sus conocidos, Amelia y Ángeles seguían defendiendo la veracidad del romance. Incluso, una de ellas llegó a utilizar como imagen de perfil la foto de su enamorado (en realidad era una imagen del general estadounidense retirado Wesley Clark). El otro supuesto novio suplantaba la imagen de Mario Guerra, un político estadounidense de origen cubano. Para justificar sus mentiras, los estafadores también les mostraron a las hermanas un supuesto mensaje enviado por Pedro Sánchez, que, como suele ser habitual en este tipo de fraudes, contenía evidentes faltas de ortografía.
Poco a poco, las hermanas se fueron aislando de todas aquellas personas que les alertaban del engaño. Según cuentan quienes las conocían, los supuestos militares pedían cada vez más dinero con diferentes excusas y ellas llegaron al punto de gastarse toda su pensión en los estafadores. Pasaron de llevar una buena vida a estar encerradas en casa.
Lejos de percatarse del engaño, las hermanas comenzaron a contraer deudas para acometer los pagos. Algunos vecinos cuentan que los Gutiérrez Ayuso les llegaron a pedir cantidades de hasta 15.000 euros, alegando que lo necesitaban para pagar los gasto de una herencia que iban a recibir y que, una vez recibido, podrían devolverles el doble de lo prestado. También se sabe que vendieron un piso que tenían en propiedad en Madrid y que alquilaron una habitación en su casa a un hombre hace unos meses. Precisamente, uno de los motivos que hace sospechar a la Policía de que el asesinato fue por un ajuste de cuentas es que, hace unos meses, las ancianas tuvieron un enfrentamiento a martillazos con este inquilino, que les reclamaba 60.000 euros. Los tres hermanos tuvieron que cambiar la cerradura del domicilio.
La investigación ha descubierto que las víctimas debían más de 400.000 euros, cifra que los estafadores lograron obtener después de un lustro de engaños. Para sufragar estos gastos, se cree que las ancianas pidieron importantes cantidades de dinero a las personas equivocadas. Todo parece indicar que, ante la imposibilidad de cobrar la elevada deuda, los prestamistas decidieron liquidarla con la vida de sus deudores.
Hora 14 Madrid (19/01/2024)
25:00
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Una nueva versión de la 'estafa nigeriana'
La estafa en la que cayeron las hermanas de Morata de Tajuña es una variante del 'timo nigeriano' o 'timo 419', conocido así por el número de artículo del código penal de Nigeria que hace mención a este delito.
Este tipo de estafa, que en sus orígenes se materializaba por teléfono o por correo electrónico, suplantaba, en un principio, a una supuesta autoridad gubernamental o empresarial que pedía ayuda a cambio de entregar una importante suma de dinero. Por ejemplo, una conocida 'estafa nigeriana' consistía en hacerse pasar por la hija del exdictador libio Muamar el Gaddafi. La supuesta hija del dictador argumentaba que no le permitían realizar operaciones bancarias por la situación en su país, pero que el banco le había sugerido la posibilidad de que hubiera un beneficiario extranjero de sus fondos. Con este pretexto, pedía una importante suma de dinero con la promesa de transferir, de vuelta, unos 600.000 euros.
En una versión renovada de este timo, los estafadores buscan a personas vulnerables a través de las redes sociales. Es el caso de las hermanas Gutiérrez Ayuso, en cuyo perfil de Facebook se pueden ver mensajes de varios hombres que les piropean y les solicitan amistad. Es habitual que los estafadores se hagan pasar por militares y que digan haber obtenido dinero del petróleo o de la minería en países extranjeros. El problema es que, como por su condición de militares no pueden quedárselo a título personal, necesitan entregárselo a alguien de confianza. La única condición para enviarles esta cuantía es que las víctimas realicen, previamente, pagos para los supuestos trámites que deben llevar a cabo.
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