Desmantelada una banda que acumulaba más de 1.100 plantas de marihuana en Villar del Olmo, Aranjuez y Toledo

La actividad ilícita en una casa unifamiliar de Villar del Olmo propició el seguimiento de una organización dedicada al cultivo y menudeo de marihuana entre la Comunidad de Madrid y la provincia de Toledo. Agentes del equipo ROCA del puesto de la Guardia Civil en Aranjuez iniciaron la investigación tras detectar, a principios del pasado verano, un "preocupante incremento del consumo de sustancias prohibidas, sobre todo entre menores de edad".

La cantidad de denuncias presentadas por los agentes hicieron sospechar al cuerpo de la existencia de un grupo organizado, dedicado a la venta de estupefacientes mediante menudeo, y activaron una investigación que les llevó a vigilar viviendas rurales apartadas de núcleos poblaciones grandes y que pudieran llamar plantaciones de marihuana sin llamar la atención. Y esa vigilancia fructificó en Villar del Olmo donde los agentes detectaron un pinchazo a la red eléctrica y realizaron un estrecho seguimiento a las personas que acudían a la vivienda.

Corredor de la droga

Antes de intervenir en Villar del Olmo, los agentes identificaron a cuatro personas y localizaron cuatro lugares donde el presunto grupo criminal actuaba, a pesar de las medidas de seguridad "extremas" tomadas por la banda con cámaras de seguridad con detección de movimiento en todas las sedes.

La Guardia Civil localizó, además del chalet de Villar del Olmo, otra vivienda en Aranjuez, así como en los municipios de Mora y Ordaz en la provincia de Toledo donde se localizó una nave completa dedicada al cultivo ilegal. Las plantaciones habían sido instaladas en zonas subterráneas de difícil acceso. Además, utilizaban placas de matrícula dobladas, documentos de identidad falsos, cambiaban de domicilio cada poco tiempo, y solían realizar itinerarios alternativos.

La operación, una vez culminada, logró la detención de tres personas, dos hombres y una mujer cuyo "cabecilla" es un conocido delincuente con antecedentes por hechos similares. Una cuarta personas está investigada por su presunta implicación en delitos contra la salud pública, pertenencia a grupo criminal, defraudación de fluido eléctrico y falsedad documental.

En los registros domiciliaros efectuados se localizaron 1.105 plantas en estado de crecimiento, 2.970 gramos de picadura de marihuana, además utensilios y objetos para el cuidado de las mismas (lámparas, extractores, sistemas de humidificación, etc.), además de 9.000 euros ocultos dentro del salpicadero de uno de los vehículos utilizados. El grupo contaba con un novedoso sistema para la extracción de ozono, añadiendo esencias para evitar el olor característico de la marihuana.

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