Fuenlabrada paraliza las obras del centro de menores inmigrantes y la Comunidad de Madrid habla de "rebeldía"
Los tribunales han estimado el recurso de la Comunidad de Madrid para que el Ayuntamiento no paralice las obras de acondicionamiento del centro de menores inmigrantes de La Cantueña, pero el Consistorio, alegando no tener notificación oficial al respecto, este miércoles ha procedido a parar los trabajos. El Gobierno de Ayuso habla de "alcalde en rebeldía"
Fuenlabrada precinta las obras del centro de menores inmigrantes al no tener comunicación de la decisión del juez
Fuenlabrada
Al filo de la una de la tarde un policía municipal de Fuenlabrada se presentaba a las puertas del edificio de La Cantueña donde la Comunidad de Madrid hace obras para instalar allí un centro de menores inmigrantes no acompañados, y comunicaba al Jefe de Obras y a responsables de la empresa que tenían que paralizar los trabajos en virtud de un decreto municipal.
Hoy se conocía que el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 24 ha estimado el recurso de la Comunidad de Madrid en el que pedía medidas cautelares provisionalísimas para evitar que el Ayuntamiento de Fuenlabrada paralizara estas obras. De esta forma, se suspendería el decreto municipal, emitido la pasada semana, para paralizar los trabajos. A pesar de esto, el Ayuntamiento aseguraba esta mañana que todavía no le ha llegado la notificación oficial de la decisión judicial y por eso hacía efectivo el decreto de cese de estos trabajos, que emitió la semana pasada.
Recordemos que el Ayuntamiento ha abierto un expediente de reversión de cesión de este espacio a la Comunidad de Madrid, alegando que el uso por el que se cedió no se está respetando. Por eso, el alcalde, Javier Ayala, argumenta que hasta que no se resuelva el expediente, no tendrían que iniciarse estas obras y de ahí, la paralización. Ahora, el Consistorio tiene tres días para presentar alegaciones al recurso y pasado este tiempo el juez determinará si finalmente las obras pueden o no reanudarse. En este centro la Comunidad de Madrid quiere instalar, en una primera fase, a 100 menores inmigrantes.
"Alcalde en rebeldía"
En el momento en el que se precintaban las obras comparecía en la Puerta del Sol el consejero de Presidencia y portavoz del gobierno de la Comunidad de Madrid, Miguel Ángel García, que ha conocido la actuación municipal en directo. Al respecto ha acusado al Ayuntamiento de Fuenlabrada y a su alcalde de declararse “en rebeldía” y ha tildado su actuación de “gravísima”.
“Si ya era grave una resolución en la que se acusaba a otra administración de obrar sin licencia”, ha señalado el consejero, “más grave es ponerse en rebeldía y no acatar una resolución judicial”. Al respecto García ha explicado que el gobierno regional habilitó un artículo de la Ley del Suelo para que, por motivo de urgencia e interés general, pudieran iniciarse las obras. Y ha añadido que al alcalde le “debería estar llegando” la notificación judicial que permite que continúen los trabajos.
“Las obras continuarán”, ha afirmado el portavoz regional, que ha pedido al alcalde “que deje trabajar a la administración de la Comunidad de Madrid” y ha criticado su “doble vara de medir” al intentar impedir la creación de un centro de menores extranjeros no acompañados que, según García, también beneficiará a toda la ciudadanía fuenlabreña y cumplirá “con todos los requisitos que marca la ley”.
Por su parte la consejera de Asuntos Sociales, Familia y Juventud, Ana Dávila, acusaba ayer al alcalde fuenlabreño, Javier Ayala, de “rechazar” a estos menores y boicotear continuamente con su actitud todo el proceso administrativo. Ayala en todo momento denunció que el uso que se daba al edificio no era el acordado en convenio y que este modelo de atención a menores inmigrantes no acompañados no lo compartían, por considerar que alojarlos en un macrocentro alejado “de todo” no favorecería su integración. Además, pedía a la Comunidad de Madrid que se reuniera con los ayuntamientos de la región para acordar cómo se abordaba este asunto, acusándoles de tener “obsesión” por implantar este centro a toda costa en Fuenlabrada.
