Fuenlabrada aprueba definitivamente su Zona de Bajas Emisiones: entrará en vigor en julio
Las sanciones no se aplicarán hasta el año que viene. El alcalde insiste en que es una medida “laxa”
Fuenlabrada
El Ayuntamiento de Fuenlabrada, en su sesión de Pleno Municipal de este martes, ha aprobado de manera definitiva su Zona de Bajas Emisiones. Tras incluir parcialmente algunas alegaciones presentadas por asociaciones de transportistas, vecinos y comerciantes, la nueva medida ha salido adelante por mayoría absoluta y únicamente con los votos en contra de PP y VOX.
La ZBE, una vez aprobada, entrará en funcionamiento el próximo 1 de julio, aunque se dará una moratoria de seis meses para que las multas no sean efectivas hasta el 1 de enero de 2025. Las sanciones podrían alcanzar los 200 euros. Para ello, ya se reparten por la ciudad diferentes señales (todavía ocultas) y cámaras de reconocimiento de matrículas y una nueva estación de calidad del aire. La zona afectada por las restricciones, que en ningún caso afectarán a residentes, comerciantes ni trabajadores, se puede consultar aquí.
No habrá que pagar por aparcar
Durante el debate plenario la concejala de Movilidad del Ayuntamiento de Fuenlabrada, Ana María Pérez, ha señalado que “es mentira que vayamos a establecer parquímetros” en la ZBE y ha rechazado las acusaciones de la oposición de limitar derechos a los vecinos, ya que la normativa permitirá “el acceso a vecinos empadronados y a personas que acuden al centro a realizar una actividad económica” o servicios esenciales.
En esa línea se ha manifestado el alcalde, Javier Ayala, que ha criticado a aquellos grupos políticos que “han vertido mentiras” sobre lo que iba a suponer esta Zona de Bajas Emisiones y ha revelado que se han presentado alegaciones por parte del PP y de 173 vecinos. Por último ha indicado que la normativa será “laxa en su cumplimiento” pero, a la vez, servirá para cumplir con la obligación que tienen todos los ayuntamientos de más de 50.000 habitantes y protege la salud pública y el medio ambiente.
Por su parte la portavoz del PP, Noelia Núñez, ha criticado que no se haya informado a los vecinos y que no existan “criterios técnicos” que justifiquen el límite de la zona establecida “unilateralmente” por el Gobierno municipal La portavoz de VOZ, Isabel Pérez Moñino, ha tildado la normativa de “medida ideológica”, con un coste de más de un millón de euros y que no está avalada por los informes de calidad ambiental en el municipio.
Sin restricciones para los empadronados
El Ayuntamiento ha informado de que la excepción a la normativa hará que “queden exentos de las restricciones todos aquellos vehículos de la ciudad empadronados en la ciudad y, por tanto, dados de alta en el impuesto de vehículos de tracción mecánica”. Esta excepción se aplicará siempre que se acceda a la ZBE para hacer alguna gestión o realizar alguna actividad y no simplemente para atravesar este espacio. Para ello, se ha establecido un tiempo mínimo de estancia en el interior de la zona de 8 minutos y 30 segundos.
La Ordenanza fuenlabreña no incluye ninguna restricción de acceso ni de aparcamiento para todas aquellas personas que residan, trabajen o realicen actividades en el Distrito Centro de Fuenlabrada y para las cuales se podrán gestionar permisos a través de una aplicación informática que estará lista en los próximos meses.
Solo tendrán prohibido el acceso los vehículos más contaminantes (sin etiqueta o con etiqueta A) que sin tener como destino final para su actividad las calles de la ZBE, la atraviesen.
La ZBE de Fuenlabrada tiene una superficie aproximada de un kilómetro cuadrado. Está limitada al norte por las calles Málaga y Avenida de Francisco Javier Sauquillo; al este con la Calle Leganés, Avenida de Francisco Javier Sauquillo, Calle del Olivar, Calle de la Aldehuela y Calle de la Vega; al sur por la Calle Extremadura y la Calle Grecia; y al oeste por la Calle Luís Saquillo y la línea de ferrocarril.