Los autobuses que cubren la Línea 7B de Metro no están adaptados para personas con movilidad reducida

San Fernando de Henares

No es una noticia nueva. El Ayuntamiento de San Fernando de Henares vuelve a reclamar al Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM) que los autobuses del servicio especial que cubre la línea 7B de Metro –cerrada durante, al menos, 7 meses en su práctica totalidad– estén adaptados a personas con movilidad reducida. Es una petición que el consistorio sanfernandino lleva realizando desde hace semanas, puesto que el servicio es ampliamente utilizado por pacientes del Hospital del Henares.

También, el ayuntamiento pidió el aumento de frecuencias en los autobuses, la revisión de los sistemas de climatización, y la puesta en marcha de una campaña informativa sobre las rutas establecidas por este servicio especial. El pasado 29 de julio, los alcaldes de Coslada y San Fernando, Ángel Viveros y Javier Corpa, remitieron una carta al CRTM con estos reclamos, exigiendo una campaña informativa más extensa y pormenorizada dirigida, especialmente, al colectivo de mayores, donde se explicase, con claridad, las rutas y horarios establecidos. Todo después de recibir quejas vecinales en ambos consistorios.

El servicio de autobuses gratuitos alternativos recorre la misma ruta del metro, con alguna parada más. La Comunidad de Madrid, por su parte, dijo que mejoraría las frecuencias de otras líneas y escucharía las sugerencias de los ayuntamientos, pero ninguna de ellas ha sido atendida, por el momento. Respecto al cierre de la línea desde Barrio del Puerto, el plazo estimado de duración de las obras es de 9 meses. Unas obras que, en su momento, el consejero de Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Jorge Rodrigo, admitió que nada tienen que ver con la situación en San Fernando de Henares, por lo que no se contempla un cierre definitivo.

Los últimos informes detallan datos positivos

Tendrán que pasar años para garantizarlo, pero tras leer los informes solicitados a la Comunidad de Madrid, el gobierno de San Fernando de Henares pudo comprobar que, en los documentos, se dice que entre febrero de 2023 y junio de 2024, casi año y medio, las guías colocadas en los edificios apenas se han movido un milímetro, lo que sería en la práctica una situación de estabilidad.

El gobierno sanfernandino solicitó otros dos informes: uno sobre el caudal de agua y otro sobre la salidad del agua, que es una de las causantes de la porosidad del suelo y del movimiento del terreno. Según los informes de la Comunidad de Madrid, en los últimos dos años se ha pasado del bombeo de 1.800 metros cúbicos diarios con 200 gramos de sal por litro, a apenas 100 litros con un contenido de sal de 7 gramos y medio.

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