Antonio Prieto: "La Iglesia está para romper muros y tender puentes"

Alcalá de Henares

El pasado mes de septiembre, coincidiendo con el inicio de curso universitario, el rector de la Universidad de Alcalá, José Vicente Saz, anunciaba su intención de tener una reunión con la alcaldesa, Judith Piquet y con el obispo de la ciudad, Antonio Prieto. Es decir, tres de las instituciones con más peso de la ciudad, reunidas para buscar lugares comunes y poner en marcha una serie de proyectos. En otros momentos de la historia, estas instituciones han ido de la mano en el gobierno de la ciudad, pero esto ha cambiado con el paso del tiempo. El ámbito de actuación de cada institución está mas compartimentado, pero sí es importante que siga habiendo sintonía entre ellas.

En cuanto a la reunión prometida, Antonio Prieto ha confirmado que están buscando fecha, pero confía en que sea "muy pronto". La colaboración con la Universidad estará enfocada a la oferta formativa, mientras que con el consistorio van a intentar explorar la vía patrimonial. "He creado una delegación para la evangelización a través de la cultura y desde ahí queremos abrir nuestra Catedral Magistral y el Monasterio de San Bernardo como dos enclaves de turismo religioso. Para nosotros el turismo religioso es una gran oportunidad que se nos plantea para evangelizar desde nuestros monumentos".

Otro de los proyectos que tiene Prieto Lucena en su hoja de ruta, y que así queda reflejado en su hoja pastoral, es la creación de unos alojamientos temporales, en los que poder hospedar, a familias migrantes con hijos que llegan a la ciudad con necesidades especiales. "Desde que se creó la Delegación de Migraciones, el delegado está trabajando muy estrechamente con Cáritas. En un futuro cercano podríamos tener estos alojamientos, especialmente destinados a familias vulnerables que les permita tener un techo hasta que puedan salir adelante. Actualmente, colaboramos con Cáritas en dos aulas en las que se imparte español y cultura española. Pude visitar personalmente a los chicos en verano y vi unas personas con muchas ganas de aprender y es un pequeño grano de arena que queremos aportar a la integración de estas personas que sufren tanto y que han hecho un camino muy difícil hasta llegar a nosotros". En paralelo, continúa la atención a las personas sin hogar en los centros San Diego y San Juan Pablo II, así como diferentes programas de voluntariado en el Hospital Príncipe de Asturias.

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