Más de 20.000 personas ya han firmado para que se mida la presencia de gas radón en los colegios de Tres Cantos

Tres Cantos

Ya son más de 20.000 personas las que han mostrado su apoyo para que se mida la presencia de gas radón en los colegios de Tres Cantos. El pasado mes de agosto, familias de la localidad iniciaron una recogida de firmas, a través de la plataforma change.org, para instar a las administraciones a realizar las mediciones oportunas de este gas nocivo para el ser humano. Por el momento, 21.300 personas ya han firmado la petición, es decir, el equivalente a más del 40% de la población tricantina.

El gas radón es una sustancia cancerígena, se trata de una de las principales causas de cáncer de pulmón en ausencia del tabaquismo. En la localidad vecina de Colmenar Viejo ya se han realizado mediciones en el pasado, los resultados arrojaron preocupantes niveles de gas radón en los juzgados de localidad, despertando además la alarma los hasta 4 casos de cáncer producidos entre trabajadores del edificio, aunque nunca se ha comprobado que dichas enfermedades se deban a la presencia de este tipo de gas.

El principal promotor de la recogida de firmas, Abel Rodríguez Gumiel, ha estado en Hoy por Hoy Madrid Norte para trasladar cuál es la situación de la iniciativa y los próximos pasos a dar. Rodríguez Gumiel explica que el objetivo es alcanzar las 25.000 firmas para que, en primera instancia, el Ayuntamiento de Tres Cantos contemple el realizar mediciones en las aulas de la localidad y que, posteriormente, la propuesta también llegue a la propia Comunidad de Madrid.

Tres Cantos: zona de alta exposición

La administración autonómica ya ha catalogado a Tres Cantos como zona de alta exposición al gas radón. En el pasado se han realizado mediciones en la localidad, sin embargo, desde el Consejo de Seguridad Nuclear se ha trasladado a las familias tricantinas que es imposible determinar la presencia de gas en edificios concretos sin llevar a cabo mediciones específicas. De ahí, que padres y madres de la localidad se estén movilizando para cerciorarse de que la sustancia no se encuentre en las aulas a las que cada día acuden sus hijos.