La DANA también cultiva solidaridad
Los impactos van mucho más allá de daños en las poblaciones
Espacio de Ecología: La DANA también cultiva solidaridad
Alcobendas
Pasadas ya unas semanas de la trágica DANA que asoló principalmente Valencia y tras ver la movilización popular para ayudar a los ciudadanos de los núcleos urbanos, se habla muy poco de cómo ha afectado al campo, a los agricultores.
Se habla que la DANA inundó el 90% de los terrenos agrícolas y las primeras estimaciones de pérdidas están en torno a los 100 millones de pérdidas.
El agua lo arrasó todo, explotaciones agrícolas, almacenamiento de la producción… Las intensas lluvias de la DANA y el desbordamiento de los ríos Turia y Júcar han convertido grandes áreas y terrenos de la llanura litoral valenciana en un paisaje inundado, destrozando campos y destruyendo cultivos.
Y en medio de toda esta desolación también ha habido voluntarios que se han acercado a ayudar al campo, no sin antes recordar que muchos agricultores se volcaron con sus tractores y otros medios, como bombas de achique, para ayudar a sus vecinos de poblaciones cercanas.
La solidaridad también ha tocado a la agricultura ecológica y como recuerda el Centro de Estudios Rurales y de Agricultura Internacional (CERAI) los impactos que deja esta DANA van mucho más allá de daños en las poblaciones.
Desde esta entidad se destaca que la DANA ha afectado gravemente campos de productores y productoras familiares, “con la pérdida de maquinaria y cosechas que hacen difícil que vuelvan a recuperarse sin ayuda tras un golpe tan duro”.
El Centro de Estudios recuerda que las comarcas valencianas cuentan con grandes y milenarias huertas donde se producen frutas y hortalizas que alimentan a su población. Su base es el minifundio y las pequeñas empresas agrícolas que trabajan y apuestan día a día por un trabajo de proximidad vinculado al territorio y las personas que alimentan.
En muchos casos no tienen coberturas de seguros para sus campos y cuentan con limitados medios de producción. En estos días, mientras los labradores han puesto a disposición sus tractores para tareas de emergencia, muchas personas voluntarias de muchas organizaciones sociales han estado implicadas en las tareas de desescombro y limpieza de sus casas, campos y almacenes afirma el centro.
Para seguir ayudando a la agricultura ecológica CERAI ha activado una serie de acciones solidarias enmarcadas bajo el nombre de “Cultivemos solidaridad” describiendo las áreas de ayuda para tareas de emergencia, cubrir los costes de los cultivos perdidos, ayudar a replantar, reparar maquinaria o infraestructuras.
En medio de este desastre hay un labrador ecológico, Ximo Herrero Boïl, que está llamando la atención sobre este problema y visibilizando que también que el pueblo también tiene que salvar a la agricultura.
Este fin de semana, desde la Feria Biocultura, ha estado llamando la atención con una simple pizarra colocada en su puesto, en la que escribía simplemente, con mayúsculas “Ayuda al campo de Valencia”. Tanto que hasta la reina Letizia se acercó a su pequeño stand y ha compartido sus inquietudes con ella.
Hablaremos con él, para conocer cómo se vivió la catástrofe natural de la DANA en Valencia, cómo se volcó con la población y qué ha pasado con sus tierras y cultivos.