El bombero de El Molar fuera de servicio que sufrió quemaduras; “era más importante que el fuego no llegara a las viviendas”
Juan Ignacio Martín Abad ha recibido el reconocimiento de la Comunidad de Madrid por su conducta ejemplar durante este incendio forestal
Entrevista a Juan Ignacio Martín Abad, bombero premiado por la Comunidad de Madrid por su labor en el incendio de El Molar
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El Molar
El pasado mes de agosto se producía un incendio forestal en el término municipal de El Molar, afectando también a Pedrezuela. Comenzó detrás del cementerio y a causa del viento puso en riesgo numerosas viviendas de la zona, entre ellas la del bombero Juan Ignacio Martín Abad.
Martín Abad estaba fuera de servicio, no tenía equipo, cogió lo que pudo de casa para protegerse, y sin dudarlo ni un segundo, se puso a trabajar para intentar evitar que el fuego alcanzará las viviendas.
La Comunidad de Madrid acaba de reconocer a este bombero, que lleva 21 años de servicio, por su valentía y compromiso durante este incendio foresta que arrasó con más de 200 hectáreas de vegetación. Martín Abad, que sufrió quemaduras de primer grado en cuello, cara y brazos, ha explicado en Hoy por Hoy Madrid Norte, que todos los recursos se habían desplazado a Pedrezuela cuando el viento cambió de dirección. El incendio puso de nuevo en peligro la zona de viviendas de El Molar, en la que solo había una baldeadora de limpieza de calles del Ayuntamiento. Con ella extinguieron el fuego, reconoce que sabía que se estaba quemando, pero que era prioritario que las llamas no alcanzarán las viviendas.
Martín Abad cree que en el alma de ser bombero va implícito ayudar y luchar porque no le pase nada a las personas, pero también a los animales y al entorno. Cree que los bomberos siempre son conscientes de hasta donde se puede llegar, e intentan siempre extinguir con seguridad, porque cualquier error puede acabar con su vida.
Ha reconocido que la de El Molar fue una intervención complicada porque el fuego estaba muy cerca de una zona de viviendas, pero también por la orografía y la presencia de mucha vegetación en un espacio natural muy valioso como es el valle de Guadalix.