Dioses peculiares, un breve repaso por el lado más bizarro de la mitología
Dioses con penes grandes, regentes de cloacas y demonios de las faltas de ortografía son algunos de los ejemplos más peculiares que ofrecen los mitos
Dioses peculiares, un breve repaso por el lado más bizarro de la mitología
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Comunidad de Madrid
Las peculiaridades son algo que parece competir contra un deseo creciente de ser igual que los demás, ya sea en un sentido estético o propio de la personalidad de cada uno. Sin embargo, a menudo se pasa por alto el hecho de que no hay dos personas iguales, ofreciendo un sinfín de peculiaridades que nos hacen ser lo que somos y que también comparten los seres míticos.
Son varios los dioses y criaturas que, aunque tengan una función no tan convencional, han logrado hacerse un hueco en el imaginario de las personas, llegando, en muchos casos, a ganarse su respeto y devoción, a veces acompañados de leyendas tan divertidas como extrañas. Dentro de los ejemplos que uno puede encontrar, existen divinidades caracterizadas por penes descomunales, regentes de cloacas y demonios que nos obligan a cometer faltas de ortografía para arrastrarnos al infierno.
Si uno viaja al Mediterráneo, puede encontrar a Príapo, un dios que ha pasado a la historia por disponer de atributo muy particular (o, más bien, un tamaño muy particular de dicho atributo). Se trata de una deidad grecorromana que se representa como un pequeño hombre barbudo y con un gran pene, a menudo visto como un símbolo del instinto sexual y como protector de las huertas y jardines, además de la fertilidad en cualquier sentido. Según sus mitos, es hijo de Afrodita y Dioniso en una relación ocasional que tuvieron, cuyo principal atributo se debe a una maldición de Hera como castigo por la infidelidad de la diosa, aunque eso no le impidió ganarse el respeto entre los pastores.
Por otro lado, Roma va más allá y disponían de una diosa que regía la Cloaca Máxima. La diosa Cloacina proviene originalmente de la mitología etrusca. Aunque se cree que su jurisdicción no se limitaba sólo a las alcantarillas, ya que también era protectora del coito en el matrimonio. Más adelante, fue adorada como un aspecto menor de Venus en la pequeña "Capilla de Venus Cloacina", erigida frente a la Basílica Emilia en el foro romano, directamente sobre la Cloaca Máxima; y sobre ella, además, hay un rumor divertido, ya que se contaba que el rey sabino Tito Tacio (que reinó junto a Rómulo en los inicios de Roma), encontró un busto en la Cloaca Máxima y, al no saber a quién representaba, la consagró a esta diosa.
Finalmente, si uno se aleja de los dioses y se adentra en el mundo de la demonología, puede encontrar un curioso personaje originado en la Edad Media que bien podría ser la pesadilla de cualquier chat: Titivillus, el demonio de las faltas de ortografía.
Según la creencia de la época, se encargaba de introducir y recopilar los errores ortográficos en el trabajo de los escribas, bajo las órdenes de demonios de renombre como Belfegor o el propio Satanás. Aunque también se creía que producía, principalmente durante el servicio religioso y el tiempo de oración, la charla ociosa, la mala pronunciación, la murmuración y la omisión de palabras, a fin de hacer a quienes cayeran en ello, presas fáciles para arrastrar al infierno.
Si quieres conocer más en profundidad a estos personajes, ¡no te puedes perder la sección de esta semana!