Los sondeos de la nieve de Guadarrama, claves para conocer el impacto del deshielo en los cauces de los ríos

Guadarrama

Cada año se realizan en las zonas de alta montaña de la Comunidad de Madrid medio centenar de sondeos del estado de la nieve para evaluar su estado, el nivel de riesgos de aludes y el impacto del deshielo en los cauces de los ríos. Esta labor la desarrollan los Agentes Forestales en colaboración con la Agencia Estatal de Meteorología.

En concreto, se analiza el manto nivoso en enclaves del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama como los picos Cabeza de Hierro y Peñalara, o El Nevero. Uno de los agentes forestales encargados de este trabajo es Iván Rodríguez, que ha explicado en la Cadena SER que se trata de recoger datos no solo para evaluar los riesgos en montaña como deslizamientos o aludes, sino también la baja visibilidad o el viento. Además, la información recabada se pone a disposición del Canal de Isabel II para que estudie también el impacto de un posible deshielo procedente de la sierra en el caudal de los embalses que gestiona, y que estos días están sobrepasados.

Rodríguez ha destacado la importancia de estos sondeos para evaluar la peligrosidad de los aludes, que aunque en la sierra madrileña son pequeños, es más fácil que afecten a alguien por la masificación de visitantes. En cualquier caso, no se han dado casi casos de enterramiento en nieve por aludes, y casi siempre afectan a quienes están haciendo deportes alpinos.

Para estos sondeos se utilizan herramientas como termohigrómetros que miden temperatura y humedad del aire, lupas, palines o columnas de estratigrafía, que les permiten comprobar el estado de los diferentes estratos. Se hacen catas de un metro y medio de profundidad, identificando sus capas, densidad, contenido de aire, o dureza, lo que permite prevenir posibles incidentes, como deslizamientos y aludes.