Costa conquista La Riviera con un espectáculo explosivo y lleno de sorpresas

Madrid

La Riviera se vistió de fiesta este domingo para recibir a Costa, uno de los referentes más importantes del rap nacional. Desde el momento en que pisó el escenario, la energía estaba a tope, y el artista demostró que su capacidad para generar emoción en vivo sigue intacta.

La noche comenzó con Many Man, un tema lleno de fuerza que preparó el terreno para lo que se venía. Después, llegó el turno de Christian Dior, donde Costa se mostró enérgico y cercano, como si estuviera en una conversación íntima con cada uno de los presentes. El Rey dio paso a un momento especial: la primera colaboración en vivo con D.Nadie, una de las figuras emergentes de la escena, que le puso un toque fresco al concierto.

Una de las sorpresas de la noche fue cuando Costa decidió volver a sus orígenes con la icónica Morfina, un tema que provocó una reacción ensordecedora del público, quienes no dudaron en cantar cada verso con él. Sin embargo, Costa no solo trajo recuerdos de sus inicios, también demostró su actitud rebelde cuando, tras un momento de interacción con el público, no dudó en escupir agua al aire, generando risas y aún más energía.

El rapero se mostró emocionado de estar en Madrid y su conexión con la gente era palpable. Al ser vitoreado con gritos de “¡Inmortal!”, Costa aprovechó para lanzarse a un discurso sobre la importancia de la música en su vida, mostrando su gratitud hacia sus seguidores. La noche continuó con uno de los momentos más esperados: Labios Tatuados, que en esta ocasión cantó junto a un invitado especial. Era la tercera vez que la interpretaban juntos en directo, y la complicidad entre ambos en el escenario era evidente. La ovación fue unánime, y el público demostró que no se olvidan de los clásicos.

El nombre de Costa resonaba entre los asistentes como un mantra. La gente coreaba “¡Costa, gamberro!”, y las emociones no cesaban. La colaboración con Cecilio G fue otra de las joyas de la noche. A pesar de que el rapero acaparó mucho de la atención, no cabe duda de que se ganó los aplausos del público, que se entregó por completo a la vibra de la actuación.

Costa, como siempre, mostró su carácter en el escenario, exigiendo que se bajaran las luces para crear una atmósfera más íntima, un espacio oscuro con destellos blancos que ambientó de manera perfecta el tema Inadaptados. La noche siguió con Corrosivo, Callejón y Je suis Ali, canciones que fueron recibidas con una pasión desbordante por los asistentes.

El momento más emotivo llegó con Devuélveme la Vida, en la que Costa dedicó un mensaje especial a su amigo fallecido, antes de interpretar Lunático, una de las canciones más personales del artista. La gente, visiblemente emocionada, se unió en una sola voz.

El rapero también se permitió ofrecer un adelanto de su nuevo álbum, que saldrá en junio, con una canción inédita que dejó a todos con ganas de más. Luego, la energía volvió a dispararse con Obsesivo, seguida por un torbellino de emociones con Periquito, donde la gente no dejó de bailar ni un segundo.

La colaboración con Natos y Waor en Rockanrolas fue otro de los momentos álgidos, con la sala vibrando al ritmo de las rimas potentes de ambos grupos. Después, Ficción, junto a Bebe, mostró el lado más melódico de Costa, antes de llegar al cierre de la noche.

Con la energía al máximo, Costa se despidió con Inmortal, una de sus canciones más emblemáticas, para dejar a todos boquiabiertos con su impresionante puesta en escena de Halloween. Pero aún quedaba una última sorpresa: el cierre con Bebiendo Ron, donde el público explotó en una explosión de alegría y adrenalina, marcando el final de una noche que quedará grabada en la memoria de todos los presentes.