Comienza el derribo de las infraviviendas del poblado de Las Sabinas en Arroyomolinos

Arroyomolinos

El Ayuntamiento de Arroyomolinos ha iniciado los trabajos de demolición de las infraviviendas vacías que se localizan en el núcleo chabolista de Las Sabinas, ubicado a orillas del río Guadarrama, una vez que han sido abandonadas por el realojo de sus habitantes.

Se trata de construcciones que se encuentran ya deshabitadas, que en su momento se levantaron "de forma indiscriminada e ilegal en suelo público y que, además, infringen las normas urbanísticas, de seguridad, de salubridad y sanitarias que se deben seguir en cualquier ámbito residencial".

Una vez que se complete el derribo de las chabolas y se culmine el realojo de las familias que cumplan con los requisitos establecidos, el Ayuntamiento inhabilitará los terrenos a través de todas las herramientas que se encuentran a su disposición para evitar que en el futuro se edifiquen nuevas infraviviendas.

Los trabajos de demolición que se ejecutan estos días representan además el primer paso de un Plan Integral que dará lugar a la creación de "un entorno natural seguro y ordenado en pleno corazón del parque regional del curso medio del río Guadarrama", según ha señalado el Consistorio en una nota.

El proyecto, que avanzará en el futuro con el derribo del resto de infraviviendas, tiene como fin el acondicionamiento paisajístico del lugar a través de un plan que transforme el espacio y promueva su recuperación y su uso adecuado.

Más allá de actuar frente a un problema de estas características, con este Plan Integral el Ayuntamiento busca "sentar las bases para la regeneración sostenible y estética del área afectada, que es uno de los pulmones verdes del municipio".

En marzo de 2023 se publicó en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid el último convenio de realojamiento para familias del poblado chabolista de Las Sabinas, en su parte de Arroyomolinos, que incluía el realojamiento de 90 familias del núcleo de viviendas irregulares y que venía a completar el trabajo del convenio de 2013.

En esa actuación anterior, las administraciones realojaron a 54 familias tras una inversión de 12 millones de euros, y solo estaba pendiente este nuevo convenio para dar acceso a una vivienda a "otras 90 familias que no pudieron adherirse al anterior y cuyo realojo permitiría el desmantelamiento completo".

El convenio incluía todas las actuaciones necesarias para la erradicación definitiva de este poblado, como el derribo de las infraviviendas y la limpieza y acondicionamiento medioambiental de la zona en la que se encuentran, en el margen del río Guadarrama entre los municipios de Arroyomolinos y Móstoles.