Nao Albet y Marcel Borràs interpretan su separación en Nave 10 Matadero:"Cuando estrenamos la función en Barcelona, después estuvimos muchos meses sin vernos"

Madrid

Este fin de semana han pasado por A vivir Madrid los dramaturgos e intérpretes Nao Albet y Marcel Borràs, creadores de una de las propuestas escénicas más singulares del momento. Desde la Nave 10 de Matadero Madrid, conversamos con ellos sobre De Nao Albet y Marcel Borràs, un montaje que lleva al límite la autoficción para explorar el final de una relación artística, personal y vital.

La obra —Premio Max 2024 a Mejor Autoría Revelación— los sitúa en el año 2061, en un hospital del futuro donde uno de los dos agoniza por un peculiar “cáncer de ego”. En ese escenario, ambos se reencuentran para repasar su historia en común: una trayectoria compartida desde los 17 años, atravesada por la amistad, el éxito, los desacuerdos y la creación.

Una autoficción radical

Durante el programa, los autores abordaron el proceso emocional de enfrentarse a su propia ruptura como material escénico. A través del humor, el delirio y la teatralidad, De Nao Albet y Marcel Borràs funciona como un testamento artístico en clave de comedia negra: “Escribimos la obra cuando ya habíamos decidido dejar de trabajar juntos”, confiesan. “Pero aún no lo habíamos procesado del todo”.

En escena, interpretan versiones exageradas, vulnerables y caricaturescas de sí mismos, permitiéndose la crueldad y la ternura. El resultado es una pieza que dinamita el teatro autobiográfico y convierte la distancia emocional en una nueva forma de creación compartida.

Teatro del ego, teatro del adiós

La función se mueve entre lo distópico y lo confesional, entre la parodia del universo teatral y la sinceridad de una despedida. En palabras de los propios creadores, “hay partes que duelen, otras que liberan, y muchas que son inventadas… aunque no tanto”.

Durante la conversación en A vivir Madrid, compartieron también cómo la obra afectó a su vínculo personal: “Cuando estrenamos la función en Barcelona, después estuvimos muchos meses sin vernos”. El montaje no solo pone fin a un ciclo creativo, sino que expone con lucidez las complejidades de la colaboración artística cuando la amistad se mezcla con la ambición y el ego.

Una despedida escénica que es también un nuevo comienzo

De Nao Albet y Marcel Borràs es una pieza insólita, emotiva y demoledora que trasciende lo personal para convertirse en una reflexión sobre las relaciones, la creación compartida y el paso del tiempo. En su paso por Madrid, el montaje se presenta como un ritual de cierre, pero también como una celebración de todo lo que fueron —y quizás seguirán siendo, por separado.

Escucha la entrevista completa en el programa A vivir Madrid: cadenaser.com/radio-madrid/a-vivir-madrid