Vecinos de Ciempozuelos se manifiestan ante la Puerta del Sol pidiendo un “centro de salud digno”

Ciempozuelos

Varias decenas de vecinos de Ciempozuelos se manifestaron en la tarde de este martes ante la sede de la Comunidad de Madrid en la Puerta del Sol, con su alcaldesa, Raquel Jimeno al frente, para exigir que se mejore la precaria situación que se vive en el centro de salud de la localidad desde hace tiempo y que en verano se agrava, porque según la alcaldesa, Raquel Jimeno, no se cubren las bajas por vacaciones y se crea más lista de espera en atención primaria. Con una pancarta en la que podía leerse 'Ciempozuelos: un centro de salud digno, ya' se concentraron y arrojaron al suelo, de manera simbólica, flotadores salvavidas, mientras alzaban el lema de 'S.O.S Ciempozuelos'.

Jimeno leyó una carta dirigida a la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, en la que indicaba que lo que ocurría en Ciempozuelos era "una cuestión política" y aseguraba que no cejarán las protestas mientras los vecinos no "dejen de ser tratados como ciudadanos de segunda o de tercera".

Aunque en la Asamblea de Madrid, la consejera de Sanidad, Fátima Matute ya aseguró que el centro de salud de la localidad “estaba bien dimensionado” y que no había 7.000 vecinos sin médico asignado, como se denunciaba desde Ciempozuelos, sino 2.000, la alcaldesa asegura que la situación sigue siendo grave, porque se han repartido pacientes entre los médicos que ya hay, con lo que se saturan sus agendas de atención.

Además, denuncian que esos pacientes muchas veces son derivados a centros de salud de Valdemoro y hablan también de falta de medios materiales. También denuncian la supresión de vehículo sanitario para atender avisos domiciliarios, en su lugar había un servicio de taxi por la tarde para los profesionales, pero éste se ha suspendido también. Todo ello se ha reflejado en las 700 reclamaciones presentadas al respecto ante la consejería de Sanidad.

Aunque la alcaldesa asegura que manda todas las semanas una carta a la consejera Matute, no ha tenido aún ninguna respuesta, por lo que no descartaría incluso a acudir a la Justicia para defender el derecho a “una atención sanitaria digna”.