Los bomberos forestales de Alcalá de Henares denuncian que la base no cumple con el decreto de agentes cancerígenos

Alcalá de Henares

Los bomberos forestales de Alcalá de Henares levantan la voz. Este martes, 15 de julio, los bomberos forestales de la Comunidad de Madrid iniciaron una huelga hasta el 15 de agosto para reclamar mejoras urgentes en sus condiciones laborales. Hace meses que pelean por ello y ahora intensifican su lucha con esta huelga en el momento del año de más peligro para los incendios forestales. Este martes, además, marcharon desde Nuevos Ministerios hasta Diego de León, donde está la sede de TRAGSA, la empresa pública de la que dependen.

La base de forestales de Alcalá de Henares da cobertura a toda la comarca del Henares además de otros municipios más lejanos como Valdepiélagos, Talamanca de Jarama, Valdetorres de Jarama, Fuente el Saz, Valdeolmos, o Ribatejada. Pablo Antón, bombero y miembro del comité de empresa de Tragsa Bomberos Forestales, explica que el problema de la base complutense es, sobre todo, que incumple el decreto de agentes cancerígenos. Además de "obsoleta", asegura que no dispone de circuito limpio y sucio.

La ubicación de la base es otro de los problemas que denuncian los bomberos alcalaínos. Situada en Reyes Católicos, junto al vivero, Antón denuncia las complicaciones que se encuentran cada vez que tienen que acudir a un incendio con los camiones. Coches mal aparcados y en doble fila que, en más de una ocasión, "han bloqueado el paso a los camiones".

22 son los bomberos que, actualmente, prestan servicio en esta base. Aseguran los bomberos que existe un Plan General para modificar o adaptar todas las bases de la región, pero por el momento no hay ninguna propuesta concreta encima de la mesa. Alrededor de 530 bomberos que forman parte de las brigadas de toda la Comunidad de Madrid durante el verano realizarán servicios mínimos del 80 % hasta el 15 de agosto.

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