La Sierra de Guadarrama, excluida del programa que impartirá la ESO en 49 colegios de primaria de la Comunidad de Madrid

Collado Villalba

El inicio del curso escolar 2025/2026 en la Comunidad de Madrid ha dejado al descubierto una desigualdad territorial en la aplicación de uno de sus programas estrella: la implantación de 1º y 2º de secundaria en centros de primaria. Mientras 49 colegios públicos de la región comienzan a impartir este curso, todos y cada uno de los municipios de la Sierra de Guadarrama han sido excluidos de este plan. El programa, que convierte los colegios de Primaria en centros que también imparten el primer ciclo de Secundaria Obligatoria, tiene como objetivo «prolongar la infancia» de los alumnos de 11 y 12 años, ofreciéndoles un «entorno más seguro y estable», según el ejecutivo de Ayuso.

La iniciativa, voluntaria para centros y familias, se puso en marcha con la previsión de que 52 colegios participaran. Sin embargo, tres de ellos aplazaron su incorporación al próximo curso por falta de solicitudes, entre ellos el único de nuestra zona, el CEIP Príncipe de Asturias en Navacerrada; por lo que finalmente son 49 los centros que estrenan el programa. La Consejería de Educación, Ciencia y Universidades ha destinado más de 4 millones de euros para adaptar y equipar estos centros con nuevo mobiliario, material didáctico y equipamiento tecnológico. Los alumnos que cursen 1º y 2º de la ESO en estos centros contarán con un jefe de estudios dedicado únicamente a Secundaria y, al terminar segundo, pasarán a su instituto de referencia para continuar con 3º de la ESO.

Pese a que el programa se extiende por diversas zonas de la región (centro, sur, este, norte y oeste), la exclusión de la totalidad de los municipios de la Sierra de Guadarrama ha suscitado críticas. El Gobierno regional no ofrece así a los padres de esta comarca la posibilidad de que sus hijos de 12 años continúen en su colegio de primaria, una opción de la que sí disfrutan los vecinos de la mayoría de las otras zonas. El curso arranca además con otras novedades como la reducción de la ratio de alumnos por aula, la jornada partida obligatoria y medidas para limitar el uso de pantallas en los centros.