La Fiscalía pide prisión permanente revisable para el acusado de matar a su mujer y a su hija de 6 años en Móstoles
La Fiscalía acusa a G.P.S. de dos delitos de asesinato con agravantes de género y parentesco
Portal de Móstoles dónde vivían las víctimas / Ser Madrid Oeste
El hombre acusado de asesinar brutalmente a su pareja y a su hija de 6 años en su domicilio de Móstoles (Madrid) el 6 de noviembre de 2022 es juzgado desde este jueves en la Audiencia Provincial de Madrid, donde enfrenta una petición de prisión permanente revisable por parte de la Fiscalía.
Según ha informado la Fiscalía este miércoles, la Sección 26 de la audiencia madrileña juzgará con jurado desde el jueves a G.P.S., para el que pide 25 años de prisión por el asesinato de su pareja y prisión permanente revisable por matar a la hija de ambos.
El asesinato de Irina, de 29 años, y de su hija, Mariya, suscitó una fuerte repulsa social y política.
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El acusado, de nacionalidad búlgara y que en el momento de los hechos tenía 38 años, avisó a conocidos del crimen que había cometido y alertó a las autoridades, que hallaron a las víctimas en el domicilio familiar y también al agresor, que había intentado suicidarse, según informaron fuentes de emergencias a EFE.
La Fiscalía considera probado que este acusado acuchilló a su pareja y a su hija numerosas veces hasta causarles la muerte "de forma sorpresiva e imprevista", sin que las víctimas tuvieran ocasión de defenderse.
Y en su escrito, habla también de el acusado tenía con su pareja un comportamiento controlador, "la pegaba y no le gustaba que fuese siquiera al gimnasio", al que esta acudía "para fortalecerse ante el miedo que sentía" hacia él, siendo ella además la persona que se ocupaba de la hija de ambos en "todo momento".
La Fiscalía pide condenar a este acusado, en prisión provisional desde el día de los asesinatos, como autor de dos delitos de asesinato con agravantes de género y de parentesco, por los que pide penas de 25 años de cárcel y de prisión permanente revisable, además de indemnizaciones por más de 320.000 euros a distintos familiares de sus víctimas.
