“La loca de Gandoca”, la novela que convirtió la defensa de la naturaleza en un grito literario

Alcobendas

En la sección “Vuelta al Mundo en 90 libros” con Davel Puente en SER Madrid Norte, el libro escogido esta semana nos lleva a Costa Rica con ‘La loca de Gandoca’, publicado en los años noventa y convertido desde entonces en un verdadero clásico de la literatura centroamericana. Su autora, Anacristina Rossi, es una de las voces más combativas del país: feminista, ecologista y siempre polémica, no escribió una historia romántica sino una denuncia directa contra la corrupción y los planes urbanísticos que amenazaban con arrasar un paraíso natural. El propio título encierra una ironía amarga: cuando alguien defiende con pasión lo que ama, lo más sencillo es tacharlo de “loco”.

La novela tiene como protagonista a Daniela, una mujer que se enamora del paisaje de Gandoca y que, al descubrir los proyectos de urbanización que pondrían en peligro la zona, decide emprender una lucha en solitario para protegerla. En su camino se enfrenta a políticos, empresarios y burócratas, y la narración combina descripciones intensas y poéticas de la naturaleza con una voz firme de denuncia social. El resultado es un relato que emociona y a la vez sacude, a medio camino entre la poesía y el manifiesto.

Entre los momentos más memorables de la obra está el descubrimiento del plan urbanístico: Daniela destapa que una empresa quiere levantar hoteles con lujos absurdos, incluso una pista de patinaje sobre hielo en pleno Caribe, y al intentar frenarlo se topa con un muro de indiferencia en las oficinas públicas. A nivel personal, la historia también refleja golpes devastadores, como la crisis y la muerte de Carlos Manuel, marcado por el alcoholismo y un accidente de coche, un episodio que hunde a Daniela pero también la fortalece. Y hay espacio para la sátira y la tragedia con el episodio en el que adopta la identidad masculina de Jorge Boscoso para poder investigar, convencida de que solo así la tomarán en serio.

Treinta años después, ‘La loca de Gandoca’ sigue siendo igual de actual. Es una novela breve, ágil y entretenida, y sus temas, por desgracia, continúan siendo relevantes. En Costa Rica se estudia en colegios y ha pasado a formar parte del patrimonio cultural del país, pero sus páginas hablan de un conflicto universal: el choque entre un progreso mal entendido y la defensa de la naturaleza.

Por todo ello, la recomendación es clara: este es un libro ligero, directo y emocionante que abre los ojos sobre cómo tratamos nuestro entorno. Y si defender un lugar así es sinónimo de estar loco, entonces necesitamos más locos como Daniela… y como Anacristina Rossi.