El Ayuntamiento de Madrid reaviva la polémica del aborto: “Tiene efectos de los que informar”

Madrid

El Ayuntamiento de Madrid no ha aclarado qué hará con la proposición de VOX que el Partido Popular aprobó en el pleno de la semana pasada y que hablaba del mal llamado “síndrome post-aborto", que no tiene ningún tipo de evidencia científica. El PP respaldó un texto de la ultraderecha que obligaba a los trabajadores municipales a contarle a las mujeres que han decidido abortar que pueden sufrir alcoholismo, anorexia o agresividad.

El alcalde, José Luis Martínez Almeida, trató de salir del laberinto político en el que él y su partido se habían metido, una vez constatado que no contaba con el apoyo explícito del Gobierno de la Comunidad de Madrid, siempre dispuesto a entrar en cualquier batalla ideológica. El Gobierno municipal reconoció que no existe evidencia científica de que una interrupción voluntaria del embarazo pueda tener esas consecuencias en las mujeres y aseguró que la información solo iría dirigida a aquellas mujeres que la pidieran voluntariamente, nunca de manera obligatoria. Sin embargo, no es lo que dice el texto aprobado por el Partido Popular, que habla de “obligatoriedad”.

Ahora, la vicealcaldesa de Madrid, Inmaculada Sanz, ha reavivado la polémica a preguntas de los periodistas. La número dos del Gobierno municipal asegura que hay unos “efectos de los que se quiere informar”, aunque insiste en que no existe una categoría científica que lo respalde. La vicealcaldesa se remite a las palabras de Almeida, porque considera que “lo ha explicado suficientemente claro”. El Ayuntamiento no ha explicado en qué términos trasladará a la normativa municipal el texto de la extrema derecha que el PP apoyó en el Pleno de Cibeles. Tienen la opción de guardarlo en un cajón o de introducir los cambios que consideren oportunos.