La Comunidad de Madrid empieza el entierro de las gallinas sacrificadas por la gripe aviar en Valdemoro
El consejero de Agricultura asegura que se está “siguiendo minuto a minuto” todo el proceso para garantizar la seguridad, un proceso que cuenta con la autorización del Ministerio y la Dirección General de Biodiversidad. Las medidas en la zona de protección finalizan este martes

Carlos Novillo, consejero de Agricultura de la Comunidad de Madrid, habla del enterramiento de las gallinas afectadas por gripe aviar en Valdemoro.
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Valdemoro
Carlos Novillo, consejero de Agricultura, Medio Ambiente e Interior de la Comunidad de Madrid, afirma que “el control es absoluto” en la explotación de Valdemoro, donde se detectó el pasado 2 de octubre un foco de gripe aviar altamente patógena (subtipo H5N1).
Una vez detectado el caso y sacrificadas las gallinas, se está procediendo al entierro de los cuerpos, en un terreno previamente preparado para evitar que haya cualquier filtración a los niveles freáticos, según ha explicado el consejero.
Novillo recuerda que el enterramiento es uno de los procedimientos autorizados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Además, se ha realizado un “estudio de autorización por parte de la Dirección General de Biodiversidad, con todas las premisas para llevar a cabo este enterramiento”. En concreto se ha hecho un estudio previo del suelo para determinar la cobertura de cal y luego tierra, necesarias, para impermeabilizar los suelos, con el fin de “evitar que haya filtraciones a los niveles freáticos”. Un proceso que Novillo asegura se está siguiendo “minuto a minuto para que no haya ninguna afectación”.
La prioridad para la salud ahora es enterrar cuando antes a las gallinas para que “no haya propagación del virus a otras granjas”. El consejero ha precisado que aunque se trata de una zoonosis no ha habido ningún caso de trasmisión a personas en toda España.
Fin de las medidas de la zona de protección
Fue a principios de octubre cuando se detectó en Valdemoro este foco que afectaba a unas 450.000 gallinas repartidas en cinco naves, cuatro de ellas en jaulas y una en suelo. Entonces la Dirección General de Agricultura, Ganadería y Alimentación procedió a la aplicación de un protocolo con diferentes medidas de protección, que este martes terminarían.
Se establecía entonces una zona de protección de tres kilómetros y una de vigilancia de diez kilómetros. Se prohibía la cría de aves de corral al aire libre salvo autorización, el uso de telas pajareras, emplear agua no tratada procedente de depósitos exteriores y la presencia de aves de corral en ferias, certámenes o concentraciones de animales.

Pilar García
Pilar García González es Licenciada en Ciencias de la Información (Periodismo) y redactora de informativos...




