El jurado declara culpable al hombre que asesinó a su mujer y a su hija de 6 años en Móstoles
Se aprecian las agravantes de parentesco y la atenuante leve por alteración psíquica

Portal de Móstoles dónde vivían las víctimas / Ser Madrid Oeste

Móstoles
El jurado popular ha declarado culpable, por unanimidad, al acusado que se enfrenta a una petición de prisión permanente revisable por matar a su mujer y a la hija de ambos, de 6 años, al considerar probado que las asesinó intencionadamente, aunque le reconoce las atenuantes de confesión y de alteración psíquica leve.
En el veredicto, dictado el martes a última hora y dado a conocer este miércoles, los miembros del jurado ven culpable por unanimidad a Galín P.S. del asesinato de la mujer y de la niña, a las que asestó una veintena de puñaladas el 6 de noviembre de 2022 en su domicilio de Móstoles (Madrid).
Han apreciado la agravante de parentesco y las atenuantes de confesión y de leve alteración psíquica, precisan las fuentes, sin que por el momento hayan trascendido más detalles del veredicto, que siempre se ciñe a los hechos que se consideran probados, sin entrar en la condena que conllevarían.
Una vez leído el veredicto las partes han ajustado su petición de condena para el acusado, y la Fiscalía ha rebajado de 25 a 20 años la petición de cárcel por el asesinato de la madre -aplicando las dos atenuantes-, pero ha mantenido la petición de prisión permanente revisable por el asesinato de la niña.
Ahora la magistrada presidenta de la Sala dictará una sentencia acorde con el mismo en la que se precisará la condena, y que se conocerá en los siguientes días.
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El asesinato de Irina, de 29 años, y de su hija, Mariya, suscitó una fuerte repulsa social y política.
Durante el juicio el fiscal mantuvo que Galín cometió dos asesinatos con las circunstancias agravantes de género y parentesco y, aunque inicialmente no contemplaba ninguna atenuante, finalmente apreció la de confesión, ya que el acusado no avisó a la Policía tras el crimen pero sí lo confesó a familiares de las víctimas.
La abogada de la acusación particular mantuvo la petición de prisión permanente revisable por el doble crimen, sin atenuantes, mientras que la letrada de la Comunidad de Madrid pidió para el acusado 25 años de cárcel por el asesinato de la mujer y prisión permanente revisable por el de la menor.
Por su parte la letrada del acusado defendió que debía ser condenado a 16 años de cárcel por dos homicidios, con las atenuantes de alteración psíquica y de confesión, ya que su estado mental le llevó a cometer un "suicidio ampliado", en su caso "por compasión".
Durante el juicio el acusado reconoció el crimen, explicando que una depresión le llevó a querer suicidarse y a pensar que los tres debían morir para no sufrir, de modo que apuñaló "rápido" a su mujer y su hija y luego trató de matarse pero se quedó sin fuerzas y desmayó.
Las forenses que practicaron las autopsias a la víctimas confirmaron en la vista oral que la niña recibió 17 puñaladas y la madre 22, ambas tenían heridas mortales en el cuello y la niña trató de defenderse.
En el juicio también declararon tres psiquiatras que descartaron que el acusado presentase una sintomatología psicótica y precisaron que una persona que lleva a cabo un suicidio ampliado "puede ser consciente de lo que hace".
La psiquiatra que le trató en prisión le diagnosticó una depresión mayor pero sin alteración de sus capacidades




