Roswell vuelve a escena, nuevos documentos reavivan el misterio del supuesto ovni de 1947

Alcobendas

En los últimos meses, han salido a la luz varios documentos y reportes recientemente desclasificados que reavivan el interés público y académico en el famoso incidente de Roswell, ocurrido en 1947 en Nuevo México. Aunque ninguna nueva prueba concluyente ha confirmado una versión definitiva extraterrestre, los materiales arrojan luz sobre lo que hasta ahora era especulación, y muestran que el gobierno de EE. UU. continúa respondiendo a preguntas largamente silenciadas.

La Oficina de Resolución de Anomalías de Todo Dominio (All-domain Anomaly Resolution Office, AARO), creada en 2022 para investigar fenómenos aéreos no identificados, publicó un informe en el que revisa casos antiguos, entre ellos los avistamientos en Roswell. En este informe se afirma que no se ha encontrado evidencia de tecnología alienígena ni cuerpos extraterrestres, y que muchos de los testimonios populares podrían corresponder a tecnología clasificada de la época, como los experimentos con globos de gran altitud del Proyecto Mogul.

Una de las novedades más comentadas es la aparición silenciosa de un vídeo de casi 22 minutos titulado The Roswell Incident, que fue añadido recientemente al catálogo de los Archivos Nacionales (National Archives) de los EE. UU Este material forma parte de una serie de grabaciones y fuentes utilizadas para los informes oficiales del USAF (The Roswell Reports de 1994 y 1997). En el vídeo aparecen imágenes de lo que muchos han identificado como restos metálicos y un paisaje que algunos creen puede sugerir el esqueleto de seres, aunque la calidad de la filmación es baja y las figuras no discernibles.

Los Archivos Nacionales han aclarado que ese material audiovisual fue filmado principalmente para fines documentales, como parte de la producción de los informes oficiales, y no se trata de material nuevo descubierto recientemente que ofrezca datos inéditos en cuanto a cuerpos extraterrestres.

Otra revelación importante proviene del análisis histórico: la confirmación por parte del gobierno, reiterada en múltiples informes desclasificados, de que la explicación más plausible para los restos recuperados en Roswell está vinculada al Proyecto Mogul, un programa clasificado durante la Guerra Fría que usaba globos de gran altitud para detectar pruebas nucleares soviéticas. Este proyecto fue mantenido en secreto durante décadas, lo que generó confusión pública cuando ocurrieron los hechos.

Estas revelaciones no resuelven el misterio, pero ayudan a delimitarlo mejor: lo que hoy puede decirse con mayor certeza es que Roswell no ha dejado de generar preguntas y solicitudes de transparencia. Lo que parecía estar reservado para el cielo y las teorías conspirativas está siendo investigado con más documentos y rigor, aunque la verdad última siga evadiendo una confirmación plena.

Sobre este asunto hablamos esta semana en nuestro espacio de Enigmas y Misterios, con Álvaro Martín.