El Escorial insiste en la cabalgata con renos mientras Unidas, PSOE y Hacer denuncian maltrato animal
Unidas, PSOE y Hacer cuestionan que se someta a los renos a ruido, luces, aglomeraciones y un hábitat ajeno, mientras el PP insiste en que no hay estrés animal

PACMA

El Escorial
La presencia de renos reales en la cabalgata de Papá Noel de El Escorial, prevista para este 14 de diciembre, ha vuelto a reactivar el debate sobre el bienestar animal en el municipio. A pocos días del desfile, la decisión del Ayuntamiento de mantener esta práctica enfrenta de nuevo a los grupos políticos y pone sobre la mesa hasta qué punto las celebraciones navideñas deben apoyarse en espectáculos con animales.
El alcalde, Antonio Vicente, defiende la legalidad del evento. Asegura que la documentación aportada por la empresa responsable es la misma que en años anteriores, cuando tanto Seprona como Guardia Civil revisaron los informes veterinarios y autorizaron la celebración: “El año pasado estuvieron Seprona y Guardia Civil, vieron la documentación y afirmaron que no había ningún estrés animal. La Guardia Civil lo dio por bueno y dijo que el evento adelante.”
Desde Unidas El Escorial, su portavoz, Pablo Orueta, ha vuelto a denunciar públicamente esta práctica, recordando que es el tercer año consecutivo en el que se incorporan renos vivos al desfile. Orueta insiste en que especialistas en biología y veterinaria coinciden en que desplazarlos fuera de su hábitat natural supone maltrato animal: “Tenemos que decir no, no al maltrato animal en El Escorial. […] Pasear renos por un municipio fuera de su hábitat es maltrato animal.”
El PSOE de El Escorial también muestra un rechazo frontal. Considera “inaceptable” el uso de animales con fines recreativos, especialmente en un entorno histórico y natural que, aseguran, debería preservarse “sin excepciones”. Además, recuerdan que el Gobierno local del Partido Popular modificó la ordenanza de bienestar animal aprobada en la pasada legislatura, permitiendo así este tipo de espectáculos: “Esta práctica no solo es innecesaria, sino que envía un mensaje equivocado sobre el trato que merecen los animales.”
A estas posiciones se suma Hacer El Escorial, que también rechaza la utilización de renos en el desfile. Su portavoz, Gonzalo Fernández Quejo, señala que exponer a animales sensibles al ruido, la música, las luces y las aglomeraciones no solo es inapropiado, sino que resta valor a las actividades navideñas que sí destacan el tejido local: “Los renos no son decorado ni entretenimiento. La Navidad puede ser mágica sin necesidad de recurrir al maltrato animal.”
La discusión vuelve a cobrar fuerza en estas fechas, a tan solo tres días de la cabalgata, subrayando la distancia entre un modelo festivo que se resiste a cambiar y una ciudadanía que cada vez cuestiona más el uso de animales como reclamo navideño.
Pablo Badorrey
Collado Mediano, 2001. Periodista y comunicador audiovisual. Redactor de SER Madrid Sierra, especializado...




