Un niño de 7 años recibe un premio al leer más de 200 libros en un año en una biblioteca

València

Andreu Sansano de 7 años ha recibido el reconocimiento al mejor lector infantil del año 2021 de València. Ha llegado a leer más de cuatro libros a la semana son los que se ha llevado de la biblioteca a casa y lee una media de un libro cada dos días.

Tiene el carné de biblioteca desde el 17 de enero de 2019 y acude casi a diario al espacio cultural de la calle Pare Manjón, al lado de su colegio. Al mejor lector infantil de 2021 le gustan todo tipo de géneros y formatos literarios, desde cómics hasta cuentos.

Ahora bien, no duda cuando le preguntan por sus libros preferidos: los de animales. Últimamente se ha aficionado a las aventuras del ratón Geronimo Stilton, y su hermana, Tea Stilton, que recomienda a otros niños y niñas de su edad. Para Andreu, leer es una actividad divertida con la que se sumerge en múltiples historias.

Con él, su madre Alba y Elena, su bibliotecaria hemos hablado en Hoy por Hoy Locos por Valencia.

Préstamos por encima de la media

Las cifras de préstamos de libros de Andreu superan, “con diferencia”, el índice de préstamos medio y que le ha valido el reconocimiento de mejor lector infantil del año. La red de bibliotecas municipales ha otorgado por primera vez este premio, en el marco de las actividades del Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil. El acto de entrega ha tenido lugar en la biblioteca Maria Beneyto, en el barrio del Botànic, de donde es usuario el niño.

La concejala de Acción Cultural, Maite Ibáñez, ha sido la encargada de conceder el galardón, consistente en un diploma, un lote de libros, un vale para material de papelería y cuatro entradas para asistir a alguna actuación en el Teatro El Musical.

La regidora ha felicitado a Andreu Sansano, “un ejemplo para el resto de niños y niñas de su edad”, y a sus padres, “por la tarea que están realizando en este aspecto de su educación”. En ese sentido, Ibáñez ha subrayado “la importancia de la lectura en las niñas, los niños y los adolescentes; los libros son un recurso imprescindible para su proceso formativo, les permite imaginar, descubrir, viajar y conocer el mundo que nos rodea”. Asimismo, ha destacado el papel de las bibliotecas municipales en el fomento del hábito lector entre el público más joven.