Diferencias entre restyling y rebranding de marca

Villena

Durante su recorrido, una marca debe saber adaptarse al momento y trabajar su evolución. Adaptación al momento, a las generaciones de consumidores, a las circunstancias. Entorno VUCA. Solidez estratégica. Coherencia estratégica.

Este exigente contexto provoca una clara necesidad: revisar y actualizar constantemente la identidad de la marca.

¿Cuándo se necesita actualizar una marca? ¿Cuándo conviene empezar de nuevo?

Primero, debemos realizar un análisis para poder evaluar la situación actual de la marca. Lo haremos en función de datos e información relevante y estratégica. El objetivo es detectar si existe algún gap entre lo que la marca es y lo que el mercado cree o espera de ella.

Este análisis se realizará desde la perspectiva interna y externa, debiendo dar una respuesta clara y contundente. Dado esto, pueden surgir 3 escenarios, donde la marca:

• Se encuentre en un estado perfecto, con lo que no debemos hacer nada
• Necesite alguna adaptación sin que ellos afecte a su propuesta de valor
• Deba acometer una reestructuración estratégica con un cambio profundo

Vamos a detallar en qué consisten los puntos 2 y 3, restyling y rebranding. Empezamos por restyling, ¿en qué consiste?

Denominado restyling, refresh o actualización, este concepto se enfoca básicamente al estilo e imagen, respetando la propuesta de valor de la marca. En ocasiones, un nuevo look o cambio en la personalidad es suficiente para generar una reconexión con el público o captar la atención de nuevos consumidores.

En este proceso se puede actuar sobre la paleta de colores, las tipografías, las formas, los rasgos de personalidad, etc. En definitiva, sobre el modo en que la marca se expresa.

Se trata de una solución con enfoque de corto plazo que puede ayudar a reforzar la imagen existente, fortalecer la personalidad de marca, evitar confusiones, adaptarse a la tecnología, actualizar la comunicación o reflejar un cambio puntual, entre otros.

¿Un ejemplo reciente?

Instagram (Brandemia)

Y ahora, rebranding, ¿en qué consiste?

Un proceso de rebranding implica un cambio mucho más trascendente. Nos referimos a una decisión mucho más estratégica, que afecta a la propuesta de valor de la marca.

Pueden existir diferentes motivos, como un cambio o ampliación del target, un cambio o ampliación del mercado, un nuevo competidor que supone una seria amenaza o un proceso de fusión, absorción o adquisición, entre otros.

Por tanto, hablamos de cambios considerables en la estrategia, lo que implica un reposicionamiento. En este sentido, tendremos muy en cuenta uno de los principios fundamentales del branding: la consistencia. El cambio debe ser profundamente analizado, todo debe tener coherencia estratégica.

¿Un ejemplo reciente?

Cartoon Network (Brandemia)