Todo son impedimentos para que las personas migrantes y refugiadas puedan abrir una cuenta bancaria
Organizaciones de la sociedad civil que trabajan con personas refugiadas, migrantes y solicitantes de asilo llevan denunciando desde hace más de dos años numerosas irregularidades por parte de las entidades bancarias en el acceso y mantenimiento de cuentas de pago básicas dirigidas a personas en situación de vulnerabilidad.
Entrevista a Noelia Montagud, miembro de CEAR y Salif Konte, migrante de Guinea Conakry
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València
En Hoy por Hoy Locos por Valencia, Noelia Montagud, miembro del área de incidencias y participación social de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), y Salif Conte, migrante de Guinea Conakry, nos cuentan las trabas que muchas personas encuentran cuando acuden a una entidad bancaria para abrir una cuenta.
Mientras las organizaciones sociales celebran que, tanto el Gobierno de España como las entidades bancarias, hayan aplicado la legislación europea vigente para promover la inclusión financiera de las personas desplazadas por la guerra de Ucrania, exigen que también se aplique a migrantes y refugiados de otros lugares, según nos cuenta Montagud.
Las personas migrantes y solicitantes de asilo se enfrentan a innumerables trabas en el acceso y mantenimiento de una cuenta bancaria debido a las prácticas llevadas a cabo por las entidades bancarias, que incumplen de manera reiterada la normativa actual. Así lo constatan las más de 300 incidencias recogidas por varias organizaciones sociales que, señalan, tan solo muestran una pequeña parte del iceberg, ya que la gran mayoría de las incidencias quedan sin registrar.
En el 80% de las incidencias recogidas se deniega la apertura de este tipo de cuentas por motivos contrarios a la legislación vigente (no reconocimiento de documentos de identidad válidos, como el resguardo de solicitud de protección internacional, documentación adicional que no está recogida en la normativa o cobro de altas comisiones, incluso en aquellas situaciones en las que se cumplen los requisitos para solicitar la gratuidad de este tipo de cuentas). De este modo, las trabas de las entidades bancarias vulneran el derecho de las personas en situación de mayor vulnerabilidad a la inclusión financiera.
Las incidencias más habituales son el no reconocimiento de documentos de identidad válidos, como el resguardo de solicitud de protección internacional, documentación adicional que no está recogida en la normativa o cobro de altas comisiones, incluso en aquellas situaciones en las que se cumplen los requisitos para solicitar la gratuidad de este tipo de cuentas.
Esta situación ha persistido a pesar de las comunicaciones dirigidas a las propias entidades bancarias, al Banco de España, al Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (SEPBLAC) o al Gobierno, entre otras. Además, la Defensoría del Pueblo, mantiene abiertas diversas actuaciones tras recibir numerosas quejas de personas extranjeras que aseguran que se les había denegado la apertura de cuentas bancarias.
Cabe recordar que el Parlamento Europeo estableció en 2014 el derecho de acceso general de toda persona a una cuenta de pago básica y establece que los Estados miembros puedan requerir a las entidades de crédito que apliquen condiciones más ventajosas para los consumidores vulnerables, como medidas de promoción de la inclusión social dentro del mercado de productos financieros de la Unión Europea.
