Baleària considera el gas como la tecnología más limpia en la transición hacia la descarbonización del transporte marítimo
La empresa naviera cuenta con nueve buques con motores duales preparados para consumir gases renovables neutros en emisiones de CO2
Baleària define a la tecnología del gas como una apuesta viable y la más limpia que existe hoy en día, en un contexto en el que la dependencia energética y los modelos de consumo están a la orden del día. Con el horizonte de la descarbonización 2050, esta idea ha pasado a liderar la lista de urgencias de los países.
Javier Cervera, responsable de Transición Energética de Baleària, recuerda que el consumo energético tiene un sobrepeso en las empresas navieras y que este sector no es sencillo de descarbonizar porque no existe una tecnología con el suficiente grado de madurez. Por ello, explica que Baleària realiza proyectos vinculados al gas desde 2013. “Comprometernos, más allá de las exigencias de directivas comunitarias, en intentar aplicar la tecnología más limpia posible en cada momento”.
Además, ha dejado claro que el gas natural no es la solución definitiva, sino que "se trata de un combustible de transición acorde al objetivo de la descarbonización y una mejor opción que utilizar los clásicos derivados del petróleo”. Baleària defiende la tecnología del gas natural “porque es la única vía posible de ser climáticamente más exigente incluso de lo que pide la UE hoy en día”.
Desde octubre del 2021, la naviera ha reducido su consumo ante la escalada de precios que amenazaba la viabilidad de la compañía. “La decisión se adoptó por responsabilidad, ya que si no somos viables, en ningún caso podremos ser sostenibles”, resalta Cervera. Como apuesta de futuro, la empresa dispone de nueve buques con motores duales preparados para consumir un 100 % de biometano y mezclas de hidrógeno verde de hasta un 25 %, unos gases renovables neutros en emisiones de CO2, con los que Baleària está involucrada en varios proyectos.
Respecto a los biocombustibles, el responsable de Transición Energética señala que muchos de ellos triplican las emisiones del propio petróleo “si se considera que los aceites que usan para su fabricación se obtienen a partir de deforestaciones de millones de hectáreas en continentes más pobres”, concluye.