Ribó califica de excusas las razones que estarían retardando la finalización de la ampliación de la autovía V-21
El alcalde de València asegura que las obras han durado muchos años y que las últimas modificaciones no deben retrasarlas más
València
Joan Ribó, durante su visita esta mañana al CEIP Grisolía por el estreno de las pérgolas fotovoltaica, ha denunciado que las obras de la ampliación de la autovía de Puçol, la V-21, entre Port Saplaya y el término municipal de València, están durando mucho tiempo. Además, considera "excusas" las razones que están retardando, aún más, la finalización de la obra.
Final de año es la fecha prevista para encontrar completamente acabado el tramo cuyos trabajos acumulan retrasos, en muchos casos ajenos a la empresa constructora. Tal y como informamos en CADENA SER, el proyecto de ampliación de un tercer carril por sentido suma tres modificaciones, la última, muy reciente, y que tiene que ver con las exigencias que han planteado el Ayuntamiento de València y el de Alboraya y a las que ha accedido el Ministerio de Transportes.
Joan Ribó: "Las razones del retraso me suenan más a excusa que a razones"
El Ayuntamiento de Alboraya había exigido la construcción de una pasarela peatonal y ciclista sobre la V-21 a la altura de Port Saplaya. Estas dos exigencias, han obligado a retrasar la finalización de las obras, prevista para después de este verano. "Un carril VAO es una cuestión de pintura y hacer un paso de peatones son dos asuntos que tampoco deben retardar mucho las obras", ha asegurado el alcade.
Fallas: Castillos y Mascletás en más barrios de la ciudad
Además, Ribó ha accedido a la petición de trasladar mascletás y castillos a los diferentes barrios de la ciudad. "Considero un acierto la propuesta y espero que se consolide, pero a sabiendas que son los falleros quienes deben decidirlo".
Esta propuesta, que respetaría la mascletá de la Plaza del Ayuntamiento, trasladaría la fiesta a distintos rincones de la ciudad.
Joan Ribó: "Que haya mascletás en varios barrios de València es un acierto"
La visita del alcalde al CEIP Santiago Grisolía
El CEIP Municipal Profesor Santiago Grisolía arrancará el curso escolar la semana que viene con un nuevo equipamiento en sus instalaciones, dirigido a reducir los costes de consumo energético del centro: las nuevas pérgolas fotovoltaicas que ha habilitado el Ayuntamiento, que contribuirán tal como ha subrayado el alcalde de València, Joan Ribó, a la disminución de las emisiones de dióxido de carbono.
Ribó ha estado acompañado de la concejala de Gestión de Recursos, Lluïsa Notario, durante la visita las nuevas pérgolas, que han supuesto una inversión de más de 127.000 euros. Según el alcalde, "la energía total generada por la instalación solar fotovoltaica permitirá ahorrar hasta el 68 % de la demanda total del edificio. Las obras, que han supuesto una inversión de 127.787,79 euros, comenzaron el pasado mes de junio, y han tenido un plazo de ejecución de 3 meses".
Joan Ribó durante la visita al CEIP Santiago Grisolía / Ajuntament de València
Joan Ribó ha recordado que València es una de las 100 ciudades europeas elegidas para ser climáticamente neutra en 2030, y ha afirmado que “la apuesta por las energías renovables y la transición energética es uno de los principales retos que hemos asumido y que vamos a continuar impulsando”. La concejala Lluïsa Notario ha señalado que ya hay aprobados algunos proyectos y otros en redacción, como el colegio municipal de Benimaclet.
Lluïsa Notario: "El objetivo es ahorrar energía, dar más sombra y evitar emisiones de Co2"
El nuevo equipamiento de captación de energía solar está compuesto por una pérgola con 18 vidrios fotovoltaicos de unas dimensiones en planta de más de cinco metros por más de seis, y otros dos cenadores con unas dimensiones en planta de más de cinco metros por más de cuatro con un total de 12 vidrios fotovoltaicos. Además, a fin de incrementar la capacidad de producción de energía eléctrica, se ha habilitado igualmente sobre las cubiertas del centro educativo otra planta compuesta por 102 módulos fotovoltaicos convencionales de 490 Vatios pico (Wp).
La iniciativa, impulsada por el Ayuntamiento de València, busca reducir los costes correspondientes al consumo de la energía eléctrica de los colegios de educación infantil y primaria municipales y disminuir las emisiones de CO₂ a la atmósfera. La concejala de Gestión de Recursos, Lluïsa Notario, ha subrayado el carácter pionero de la iniciativa, ya que se trata de la primera instalación de este tipo en un centro de Infantil y Primaria de la ciudad, que se suma a las que ya está impulsando el Ayuntamiento en otros espacios como mercados, parques o cementerios…