AEMET califica este verano de extremadamente cálido y seco con registros sin precedentes

Gandia

Hoy comienza el otoño y parece que llega con las características propias de esta estación, con algo de inestabilidad. Y lo hace además dejando atrás un verano que la Agencia Estatal de Meteorología ha calificado de “extremadamente cálido y seco”.

Según las previsiones, en este primer día del otoño en nuestra comarca el cielo permanecerá con intervalos nubosos que podrían derivar en tormentas a partir de esta tarde, y complicarse todavía más a partir de mañana.

La Agencia Estatal de Meteorología ha decretado la alerta amarilla por tormenta y lluvias en nuestra comarca a partir de las 16 horas de mañana y hasta la media noche del sábado. Se podrían registrar hasta 20 litros por metro cuadrado de precipitación acumulada. Lluvias que nos acompañarían también durante la jornada del domingo, aunque de forma menos intensa.

Y si el otoño llega con inestabilidad, el verano nos deja cifras récord. La temperatura media ha sido de 25.3 grados, 2 grados más alta que la media habitual. Y la precipitación acumulada ha sido de 42 litros por metro cuadrado, un 45 % menos de la referencia climatológica. De hecho según la AEMET, “no hay precedentes de un verano tan cálido” como el de este año.

Aunque ha habido varios picos de calor, llama la atención lo persistente que han sido las temperaturas este verano. De los 110 días transcurridos entre el 1 de junio y el 18 de septiembre, 103 han tenido una temperatura media superior a la media. El día 13 de agosto fue el más cálido del verano en la Comunitat Valenciana. No sólo se registraron temperaturas extraordinariamente altas de más de 40 grados, sino también tormentas secas y reventones cálidos y secos. Este día se registró también la noche más cálida del trimestre  con mínimas que rondaron los 28 grados.

Hasta el 20 de septiembre, en València se han registrado 106 noches con mínimas de más de 20 grados, es decir noche tropical, lo que supone un nuevo récord superando a las 101 noches tropicales del 2003. A esto ha favorecido la alta temperatura del mar, que ha sido también la más elevada desde 1959.