Amics del Carme presenta un proyecto para mostrar el impacto de los solares vacíos en Ciutat Vella con visitas guiadas
Esta zona de València tiene 400 solares vacíos y estos datos crecen año tras año
València
La asociación Amics del Carme ha puesto en marcha esta semana Solares y Memoria, un proyecto que se centra en visitar zonas en ruinas de la Ciutat Vella de València por medio de visitas guiadas. Desde este sábado 24 de septiembre, los ciudadanos podrán conocer el pasado histórico de la zona y el porqué las ruinas son una anomalía que empobrece el entorno y limita el crecimiento del barrio.
Bajo el lema 'Conocer el pasado para soñar el futuro', Solares y Memoria son una serie de visitas a los 400 solares en ruinas que, por su valor patrimonial, antigüedad, dimensión y origen, muestran el pasado de Ciutat Vella. Los vecinos, tras lidiar con este paisaje durante 40 años, conciben la zona como un paisaje natural. Toni Cassola, miembro de la junta directiva de Amics del Carme, asegura que los valencianos deben reflexionar sobre la necesidad de transformar el entorno porque València es la principal damnificada de esta situación.
Este sábado, 24 de septiembre, a las 11 de la mañana, tendrá lugar la primera de las cuatro rutas, en esta ocasión, en el Barrio del Carmen. Estos itinerarios se han organizado para recorrer los rincones de los barrios en busca de respuestas sobre su origen, las personas que vivían o trabajaban y sobre el futuro que pueden dar sentido a los lugares.
Asimismo, durante los próximos meses, habrá visitas a la Muralla Islámica el 15 de octubre y a Velluters y La Xerea el 5 y el 19 de noviembre, respectivamente. Cassola ha destacado que los solares no aportan nada bueno a la calidad de vida del barrio y aportan suciedad y malos olores a los barrios.
El proyecto pretende recordar el pasado de los barrios que se visitarán y que actualmente se encuentran vacíos e imaginar su futuro. Por esta razón, desde Amics del Carme invitan a los vecinos a participar en estos encuentros y a compartir documentos y vivencias para imaginar un futuro diferente. En definitiva, el proyecto financiado por la Conselleria de Participación desea recuperar la memoria de los lugares y pensar en los espacios como lugares útiles.