Vender, única opción, aunque pese

Alcoy

Hoy sí que voy a hablar del Alcoyano. Contrasta mucho la situación deportiva con la económica. En la primera, nadie, ni yo, que soy de los más optimistas pensaba en un arranque tan espectacular como el que está haciendo el equipo de Vicente Parras.

Líderes, que bien suena. Y esto no es una casualidad, es el fruto del trabajo perfeccionado y mejorado. Que nadie piense que esto va a ser lo normal, ojalá. Pero no olvidemos que el equipo está en una categoría muy potente que poco a poco irán llegando por detrás los importantes y el Alcoyano , eso sí, seguro que es uno más de esa zona de privilegio... de momento "que nos quiten lo bailao".

En lo económico, hay menos broma, la situación es casi límite, parece que algunos accionistas locales no están por la labor de vender sus acciones y están perjudicando al club, entiendo que vender es perder dinero, porque las acciones no valen lo que valían. Se compraron en Segunda División, hace diez años y ahora el club está en quiebra y con una deuda de más de un millón y medio de euros.

Evidentemente, como empresario, es normal que no quiera perder dinero. Pero ahí viene la famosa alcoyanía, de la que tanto seguro que presume por ahí, ahora es momento de demostrarla a costa de una mala inversión en su día.

Por el bien del club, que está por encima de todos, vendan, no queda otra, nos duele a todos, pero más nos dolerá si esto desaparece. Pongan sentido común y no sean el perro del hortelano que no comía ni dejaba comer.